Carta a Noudiari: ‘Integridad personal y gestión municipal’ por Pilar Marí, exalcaldesa de Ibiza

Hemos asistido a un triste espectáculo , que ninguna persona de bien desea y que el Partido Popular, que todavía representa a la mayoría de los ciudadanos de ibiza, no debería haber permitido.

El Partido, en coherencia con los valores morales a los que tanto alude últimamente, debía haber analizado el tema de los “whatsups” con objetividad, escuchando a los miembros del equipo de gobierno. Pero no quiso hacerlo.

No ha querido comprobar la autenticidad de las conversaciones , ni analizar el contexto en que se dijeron. Las verdades a medias se convierten normalmente en las peores mentiras porque se utilizan intencionadamente y se han utilizado en este caso con la intención clara de provocar la dimisión del equipo de gobierno.

La dirección del PP ha dado un valor desmedido a lo publicado, que su Presidente ya conocía con anterioridad (como reconoció en un comité de dirección del PP al que asistieron los concejales que posteriormente obligó a dimitir).

Me llama la atención lo siguiente:

Que la contundencia con la que se actuó con los concejales no se aplicara a la Sra. Sansano.

El Partido no censuró su actitud cuando descalificó públicamente a sus compañeros de consistorio en una rueda de prensa llena de reproches hacia sus compañeros. Días antes, en reuniones de trabajo, no expresó ninguna queja. Sí censuró en cambio el Partido conversaciones privadas entre miembros del equipo de gobierno .

No se cuestionó ni existió interés en conocer la forma de obtener esas conversaciones privadas por parte del medio que las publicó.

Y sobre todo, no se planteó analizar los verdaderos motivos (que me ofrezco a explicar si se considera necesario) y el contexto de las conversaciones, que tuvieron lugar en momentos de mucha tensión en el Partido y en el Ayuntamiento; no se quiso saber si habían sido manipuladas, por quien las filtró o por quién las publicó, no se quiso hablar con la dirección del medio en cuestión,.. nada. Al contrario, se magnificó la situación y lejos de querer atender las razones o explicaciones de quienes participaron en ellas, se utilizaron para hacer saltar por los aires al equipo de gobierno del Ayuntamiento de la segunda ciudad de Baleares y la capital de la isla.

No hubo ningún tipo de consideración ni respeto, al que tanto se alude también, ni hacia los concejales, ni hacia el trabajo realizado en el Ayuntamiento, ni hacia las disculpas que se ofrecían por si alguien se había sentido ofendido, llegándose incluso a decir que no les importaba dejar el Ayuntamiento de Ibiza en manos de la izquierda. Eso sí es una falta de respeto a los miles de ciudadanos que dieron su confianza al programa y al proyecto del Partido Popular.

Se habla mucho de catadura moral y de respeto desde la dirección del PP, pero se ha actuado sin ningún respeto hacia los miembros del equipo de gobierno, y no en privado, sino públicamente. Aún así, hemos renunciado a nuestras actas como nos solicitó el Partido y hubiéramos podido no hacerlo y continuar en el Consistorio boicoteando la acción del Equipo de Gobierno como la Sra. Sánchez-Jáuregui, que votó en contra de temas tan importantes como la reforma del Puerto, la nueva contrata de limpieza o la reparación de la Plaza del Parque; o la Sra. Sansano que en su primera actuación como concejal no adscrita actuó como oposición… pero no lo hemos hecho por respeto a la institución y a nuestro programa electoral.

Y lo más grave de todo es que no se ha valorado lo más importante: la gestión municipal durante tres años, provocando la mayor crisis del Ayuntamiento por unas palabras malsonantes, en whatsapps privados, por los que se han pedido disculpas reiteradamente, sin tener en cuenta en ningún momento el enorme esfuerzo y dedicación de los integrantes de ese chat en dar cumplimiento al programa del partido Popular.

Los ciudadanos no se merecen este espectáculo, los problemas que hubieran podido tener los políticos entre ellos no tendrían que llegarles, son temas personales que se dan en todo ámbito laboral, pero la parte privada no tiene que hacerse pública. Se tendría que haber abordado internamente en el Partido (ninguno es de pensamiento único) y haber hecho las gestiones necesarias para evitar su publicación.

El trato entre los miembros del equipo de gobierno siempre ha sido respetuoso y correcto. Estoy segura que si cada uno de mis “whatsup”, sin cortar, sin manipular , sin utilizar fuera de contexto, explicando que pasó el día que los escribí, se comprenderían bien y, al margen de las palabras que hayan podido molestar (ninguna es un insulto), todo se habría podido explicar. Entendido el contexto, a lo mejor serían otros quienes debieran dar explicaciones. Pero no se quiso escuchar. ¿Por qué?

Entretanto, se ha paralizado la toma de decisiones municipal, hay temas muy importantes que resolver en el Ayuntamiento, importantes para la ciudad y para los ciudadanos que, a pesar del esfuerzo del personal del Ayuntamiento, no se pueden abordar en la situación actual. Quienes nos sustituyan, aún con la mejor intención , necesitarán un tiempo que no tienen para ponerse al día y tomar las decisiones que hacen falta. Este fue precisamente el argumento expuesto por mis compañeros cuando solicitaron a la dirección del Partido pasar página con las oportunas disculpas, para continuar trabajando por la ciudad. No entiendo que se quiera “expulsar” “apartar” “impedir” que continúen trabajando por la ciudad quienes no han recibido crítica por su gestión, y lo sean por unas palabras malsonantes en “whatsapps” privados, fuera de contexto, por las que, repito, se han disculpado. La ofensa se ha producido al hacerse público y la intención nunca fue hacer daño.

No quiero extenderme, sólo decir que lamento profundamente la situación que se ha producido y disculparme por la parte de responsabilidad que tengo, pero considero que la gestión de este tema ha sido pésima e injusta desde el primer minuto. Los ciudadanos han visto como en cuestión de días se pedía la dimisión de todos los que participaron en las conversaciones; después que yo misma anunciara mi dimisión, se ofreció la alcaldía a los demás concejales, olvidando los whatsup (¿no son ahora tan importantes?). Poco después, cuando los concejales vieron que el Partido pasaba página, y podía ser alcalde uno del grupo, me pidieron que aplazara mi dimisión y plantearon públicamente que pudiéramos continuar trabajando. Entonces se les obliga a dimitir….

Después se consideró continuar adelante con los socios de gobierno del PREF, más tarde se decidió «apartarlos» de la gestión municipal. En definitiva, los principios a los que se alude deben ser firmes, para ser tales principios, y no lo han sido, han ido cambiando .

Quiero acabar diciendo que los miembros del equipo de gobierno han trabajado muchísimo en interés de la ciudad. Unos mensajes privados fuera de contexto no podrán desprestigiar a quienes con ilusión y entrega han dedicado tres años a gestionar las áreas que les han sido encomendadas en el Ayuntamiento. Les deseo mucha suerte a los nuevos concejales y a la nueva Alcaldesa, pero quiero decir también que me entristece enormemente que personas del Equipo de Gobierno entregadas, capaces, preparadas e ilusionadas hayan sido “apartadas” de este modo de sus responsabilidades de gobierno, de un modo nada respetuoso, por cierto , y en base a unos criterios a los que dependiendo del día se ha dado un valor distinto.

No se puede hablar con tanta ligereza de la «estatura» moral, de los principios y los valores de los demás, sin haberse molestado en saber la verdad y el porqué de determinados comentarios. Y, sobre todo, no se puede desacreditar a tantas personas públicamente por un hecho puntual.