@N.C. / El Día Mundial en Recuerdo de las Víctimas de Violencia Vial se celebra este domingo con una concentración que tendrá lugar en la madrileña Plaza de Callao. A la cita no faltarán las familias baleares que han luchado por endurecer el código penal, entre ellas la de Vanesa Patricio Escandell, la joven ibicenca fallecida en febrero de 2017 por un conductor que circulaba bajo el efecto de las drogas en un vial de la carretera del aeropuerto.
«Nos juntamos las familias para reivindicar y concienciar sobre lo peligroso que es conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas y decir ¡basta ya!», explica Cati Escadell.
La familia de Vanesa, junto a la del ciclista ibicenco Daniel Viñals quien también falleció tras ser arrollado por un conductor bebido y drogado, y otras familias han luchado y logrado reformar el Código Penal en materia de seguridad vial, con penas más duras para los causantes de muertes al volante bajo efectos de alcohol y/o drogas.
Además, estas familias también han solicitado al Parlamento Europeo la implantación de alcoholímetros de serie en los nuevos coches. Así, a esta convocatoria también acudirán representantes de la empresa Dräger, compañía que ha estado trabajando en un sistema que impide arrancar el vehículo si el conductor ha consumido alcohol.