NouDiari / Jorge Sainz de la Baranda es uno de los ponentes destacados que hablarán mañana jueves en el VII Foro Turismo Ibiza, que se podrá seguir online de 9:30 a 14:30 horas.
Las inscripciones de este encuentro virtual están abiertas en la página web https://foroturismoibiza.com/
Sainz de la Baranda, que fue director general de Tributos y Recaudación del Govern de les Illes Balears durante la presidencia de Jaume Matas, se muestra optimista con el futuro porque afirma que esta crisis «es coyuntural y no estructural» y subraya que las administraciones públicas tienen que evitar subir impuestos, al mismo tiempo que reducen al máximo los cargos políticos para rebajar el gasto público.
Participa mañana jueves en el Foro Turismo Ibiza en una mesa redonda sobre la Regeneración del tejido productivo turístico. Financiación y tributación. ¿Por dónde va a ir su aportación?
Ante situaciones excepcionales hay que tomar medidas excepcionales. El problema es que las medidas que se están adoptando, desde mi punto de vista, no son adecuadas. Somos el único país de Europa que se está planteando subidas de impuestos.
Somos el único país de Europa que se está planteando subidas de impuestos
Creo que esa dirección es errónea. Tendríamos que plantearnos bajada de impuestos, como están haciendo todos los países de nuestro entorno: Alemania está bajando el IVA del sector turístico; Italia está bajando los impuestos directos sobre trabajadores y empresarios; Holanda está haciendo lo mismo… Grecia incluso se plantea la supresión del IVA para el sector turístico.
Al final, lo que hay que buscar es proteger la economía y tu sector productivo. El sector del turismo es el que más riqueza aporta a la economía española. Por delante de la construccion o del comercio. Entonces es esencial que el Estado se ocupe de proteger estos intereses.
¿Qué propone?
Se podría reducir el IVA, aunque hay que tener en cuenta que hay una serie de restricciones normativas. No se puede hacer lo que se quiera porque Europa no lo permite. Hay otros impuestos como los locales IBI, el IAE o las tasas de basuras… Si estamos con empresas cerradas, ¿cómo te puedes siquiera plantear cobrar la tasa de basuras?
En el inicio de la crisis, las medidas que se adoptaron eran correctas: Bajada de impuestos o flexibilización de los impuestos, ayudas en el área laboral y social para las empresas e inyección de liquidez. Todo ello mediante aplazamiento de impuestos, ERTEs, créditos ICO…
Pero el desarrollo de las medidas ha resultado caótico y ahora hay una subida de impuestos directa o encubierta. Los ERTEs han generado confusión. Hay gente que reincorporó trabajadores de nuevo a la actividad y, de repente, se encuentra con que ahora le está costando más haber reabierto, aunque sea parcialmente, que no haber permanecido cerrado.
Con el tema de los ICO hubo un inicio con liquidez, pero ahora no se plasma en una realidad a largo plazo, porque esto se está alargando más de lo que todo el mundo pensaba.
Necesitas que esas medidas se prolonguen, pero no a salto de mata.
Un momento de tanto gasto público como este ¿cómo se compensa sin subida de impuestos?
Lo primero es reducir los gastos más superfluos. Es decir, reducir al límite cualquier gasto que no sea absolutamente necesario por parte de la administración. Hay mucho gasto innecesario, desgraciadamente. En segundo lugar, tendrás que recurrir al endeudamiento, es decir, todos los países de Europa van a incrementar su déficit temporalmente para afrontar lo que tenemos ahora. Ya llegará el momento de la reactivación económica.
Esta es una situación coyuntural, no es estructural. Cuando vuelva a reactivarse la economía podrá recuperar esos niveles de déficit que ha generado ahora.
No hay otra fórmula: reducción al máximo de aquellos gastos no necesarios, destinar los esfuerzos a lo que de verdad se necesita para reactivar la economía y, logicamente, pensar en que tendremos dos años en los que los límites de déficit serán superiores a lo que nos habíamos planteado.
Hay ayudas por parte de Europa que son importantes y que no podemos perder. Desgraciadamente España es un país experto en no aprovechar los fondos europeos, incluso perdiendo ayudas que estaban concedidas.
Desgraciadamente España es un país experto en no aprovechar los fondos europeos, incluso perdiendo ayudas que estaban concedidas.
Polonia y Hungría bloquean la gestión de los fondos europeos extraordinarios por la pandemia. ¿Se va a desatrancar esta situación?
Estoy convencido. Por suerte o por desgracia Europa se rige por los grandes países, que son los que manejan la economía europea, y ellos tienen muy claro las necesidades de ayuda. Deben compaginar ese privilegio con la existencia de otros países menos afortunados que necesitan también que se les vea reconocidos y que no se les perjudique. Pero creo que se llegará a un punto de encuentro porque no nos queda otra, no nos queda otra solución.
Cuando habla de los gastos superfluos que pueden reducir las instituciones, ¿cree, por ejemplo, que en una isla como Ibiza es exagerado tener un Consell y cinco ayuntamientos? ¿Hay un exceso de cargos públicos?
Por supuesto. Tenemos, además, una estructura que parte de un Estado central, después tenemos las Comunidades Autónomas, y luego, en nuestra tierra, tenemos el Consell Insular, como serían los cabildos insulares en Canarias… y luego las entidades municipales. Evidentemente hay una duplicidad brutal de cargos que son innecesarios en muchas ocasiones porque ni siquiera tienen competencias reales sobre su área. Recuerdo un ayuntamiento que tenía un departamento de cambio climático. Si no tienes competencias en cambio climático y no puedes hacer nada en cambio climático, ¿qué haces teniendo tres asesores de cambio climático? Es que no tiene sentido.
Evidentemente hay una duplicidad brutal de cargos que son innecesarios en muchas ocasiones
Eso afecta a la distribución de competencias y a la transferencia de competencias. Evidentemente el Consell insular de Ibiza necesita efectivos en el área de Turismo porque tiene las competencias transferidas. Los ayuntamientos necesitan efectivos en aquellas competencias que tengan, pero no es necesario y desde luego hay una figura que deberíamos intentar desterrar de nuestra comunidad autónoma que es la figura del asesor.
El asesor innecesario. Es cierto que un cargo político no puede saber de todo y necesita asesorarse. Lo que pasa es que no puede ser desmedido. No podemos tener un sistema público en el que tengamos más funcionarios y más cargos públicos que gente empleada en otros sectores esenciales de la actividad.
El Estado lo ha hecho: determinados puestos hasta el de director general están ocupado por técnicos, no por políticos. Es el técnico el que conoce en profundidad el funcionamiento de la administración.
Antes ha insistido en que estamos en una crisis coyuntural y no estructural como la de 2008, ¿es entonces optimista con respecto a lo que va a pasar en un futuro cercano?
Desde que salí de la administración pública he ejercido como profesional tributario y también he llevado muchos temas de concursos de acreedores. Del año 2008 al 2012 viví muy de cerca la crisis. Sin ser un gurú, vi desde el inicio que iba para largo. Efectivamente fue larga y dura la travesía. Yo ahora soy más optimista porque la economía, antes de la pandemia, estaba funcionando, el sistema productivo se estaba recuperando. Estábamos en un momento de crecimiento y ahora hay un parón, pero no porque las islas no sean atractivas ni porque estuviésemos prestando un mal servicio, sino que seguimos teniendo el mismo potencial. Lo que ocurre es que los mercados emisores no envían ahora gente porque no se puede.
¿Pero cómo será 2021?
Todo el mundo tiene la visión puesta en la vacuna y en una serie de medidas paliativas. Sinceramente creo que 2021 va a ser duro, muy duro, las empresas no van a poder recuperarse y hay que ayudar a esas empresas a que vayan financiándose y aguantando.
La pérdida de la capacidad productiva a largo plazo y la pérdida de puestos de trabajo y de liquidez en el mercado es lo más difícil de recuperar.
Hay dos cosas esenciales para poder superarlo: liquidez y solvencia. Parece que es lo mismo, pero no es lo mismo. Es importante inyectar liquidez a los hogares, a las empresas e incluso al sector financiero para que luego pueda haber solvencia en los hogares, en las empresas y en el sector financiero. Si logramos ese equilibrio, sé que será duro el 2021 pero mi visión es optimista. Estoy convencido de que saldremos de esto y no a tan largo plazo.