@Noudiari/ El talento ibicenco sigue tratando de hacerse hueco en el panorama artístico internacional. En esta ocasión es a través de José Torres Marí, de nombre artístico José Torresma, un mallorquín hijo de padre y madre ibicencos, que trata de buscar su sitio en un escenario tan complicado como el mismísmo Hollywood, la meca del cine.
El actor, de 38 años, está empezando a echar raíces en Los Ángeles, donde reside desde hace un año. Tras tomar clases de interpretación en una de las escuelas de arte dramático más prestigiosas, está ahora un poco más cerca de conseguir su sueño de ser actor en la complicada industria estadounidense.
Su madre es de Sant Carles y su padre de Sant Antoni, donde pasa la mayor parte de sus vacaciones en verano y Navidad. Ahora, tras realizar un curso intensivo de interpretación bajo las órdenes de quienes han sido profesores de grandes rostros del séptimo arte como James Franco, Penélope Cruz, Salma Hayek o Gerard Butler, entre otros, ha conseguido tener un representante y un manager en Los Ángeles, el primer paso hacia el estrellato.
En España y particularmente en Mallorca, su cara ya suena. Ha participado como actor secundario en dos películas del director Antoni Caimari, ‘El cura y el veneno’ y ‘The Marionette’, además de en el cortometraje ‘Memorias de un piano’, a las órdenes del mismo realizador. También se le ha visto en el programa de televisión ‘De buena ley’, dando vida a uno de esos testimonios inspirados en hechos reales y en un capítulo de la serie policíaca ‘Suárez y Mariscal’.
Desde su llegada a Los Ángeles, ya ha tenido varias apariciones en el mundo del teatro, con la obra ‘Wonderwoman’ en un pequeño teatro de West Hollywood, y en ‘Poe, a Blackwood tale’, que se representó durante 3 días consecutivos en un teatro de la ‘meca del cine’.
Tras desarrollar su faceta artística durante más de una década en Madrid y su paso por el mundo de la publicidad, las series y los programas de televisión, José Torresma prueba suerte ahora en el cine estaodunidense para demostrar que el ‘producto español’ sigue de moda en Hollywood y que siempre hay una puerta abierta para ver cumplido un sueño.