@Noudiari / El conseller balear de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, Vicenç Vidal, acompañado por la directora general de Espacios Naturales y Biodiversidad, Caterina Amengual, y el gerente de IBANAT, Joan Ramon Villalonga, han presentado este lunes el balance de la campaña de incendios forestales de 2015, que se cierra, con datos de finales de septiembre, con un total de 73 incendios y 107,6 hectáreas de superficie afectada.
Vidal ha valorado de forma muy positiva el resultado de esta campaña, que se preveía complicada debido a las especiales condiciones meteorológicas extremas de la primavera y el verano, con una oleada de calor de gran intensidad y duración y escasas precipitaciones. «Creo que el dispositivo que se ha organizado y la colaboración ciudadana son los que han hecho posible que este verano tengamos una superficie afectada mucho menor de lo que se podría prever, pero hay que destacar la tendencia de un incremento de los conatos de incendio», firmó el conseller.
De los 73 siniestros, 10 se consideran incendios, un 13,69% (es decir que han afectado más de 1 hectárea) y el resto, 63, han sido conatos (86,31%). Por islas, Eivissa es la que ha salido peor parada este verano, con la particularidad de que la mayoría de los siniestros se produjeron en el mes de julio. De esta forma, sufrió un total de 23 siniestros (32%), que afectaron a un total de 53,3 hectáreas (50%). Mallorca tuvo mayor número de siniestros (39), pero menor superficie afectada con 50,4 hectáreas (47%). En Formentera se produjeron 6 incendios (8%), calcinando un total de 0,7 hectáreas (1%). Por último, en Menorca sólo hubo 5 casos (7%) con 3,2 hectáreas quemadas (3%).
De los incendios, los más destacados fueron el de Sant Joan de Labritja, en la zona de Can Escandell, que quemó una superficie de 23,6 hectáreas el pasado 3 de julio, y el de Sant Miquel, el 16 de julio, con un total de 23,04 hectáreas afectadas. Los dos siniestros fueron provocados por negligencias humanas que, junto a causas accidentales, son los principales causantes de los incendios (54%) frente al 25% de los intencionados.
Debido a la situación meteorológica favorable, por las últimas lluvias abundantes y persistentes y la previsión para las próximas semanas, la finalización de la época de peligro de incendios se adelanta a día 1 de octubre. No obstante, eso no significa que no haya riesgo de incendio forestal, un peligro que está presente durante todo el año.