@Noudiari / Las fuertes lluvias caídas este martes, además de los inconvenientes para los ciudadanos, obligaron al Parque de Bomberos de Eivissa a tener que intervenir en varios casos relacionados con desprendimientos de fachadas y caída de cascotes, aunque sin consecuencias.
Los desprendimientos se produjeron en los edificios de la calle Bartolomé Vicente Ramón y de la calle Xeringa. Por su parte, la caída de cascotes fue en el kilómetro 4,500 de la autovía aunque, como en los casos anteriores, no hubo que lamentar más daños y los bomberos acabaron su intervención sin demasiados contratiempos.
También se produjo un pequeño incendio en los bajos del edificio Ikebana, de la avenida Vuit d’Agost. La deflagración comenzó en una jardinera y afectó a ventanas, cristales y parte del mobiliario de una de las viviendas.