@Noudiari/ La presidenta de las Illes Balears, Francina Armengol, ha presentado hoy en el pleno del Comité de las Regiones de Bruselas un grupo de enmiendas del Grupo Socialista Europeo sobre turismo adaptado a las personas de edad, además de dos enmiendas sobre modernización de la economía rural.
Estas enmiendas buscan potenciar este segmento turístico en el archipiélago y paliar los costes de la insularidad a los campesinos baleares, al mismo tiempo que reconocen los esfuerzos para consolidar un modelo turístico rural.
La presidenta autonómica ha destacado que «las Illes Balears tienen una larga trayectoria en temas europeos y creo que con una clara vocación europeísta, por lo que el Govern tiene intención de intensificar las relaciones con las diferentes regiones europeas en cuestiones muy concretas que nos interesan como comunidad autónoma, como las turísticas. Además, defendemos un modelo económico lejos de los recortes y la austeridad y apostamos de forma clara por la cohesión social y el retorno de derechos. Con esto Europa tiene que tener un papel mucho más valiente y decidido».
Armengol también ha recalcado que «tenemos cuestiones básicas por tratar, como la compensación por la insularidad, muchos años reclamada y todavía no conseguida por las instituciones. Tenemos que añadir cuestiones medioambientales que nos preocupan muchísimo, desde la apuesta por la lucha contra el cambio climático y las energías renovables hasta el no rotundo de las prospecciones petroleras en Balears, que necesitarían un apoyo efectivo por parte de las instituciones europeas».
La presidenta de las Illes Balears también ha tenido palabras para los más desfavorecidos: «hablamos de cohesión social, y creo que es importante no dejar de lado a los que peor lo pasan. La crisis de los refugiados necesita, sin duda, una salida valiente desde la parte europea, y las Illes Balears nos hemos propuesto desde el minuto 1 como una comunidad que quiere ser acogedora de un gran problema a nivel internacional».
Presenta candidatura
Por otra parte, Armengol ha anunciado su candidatura a la presidencia de la Comisión de Recursos Naturales (NAT) del Comité de las Regiones. Según la jefa del gobierno autonómico «este cargo permitiría a Balears tener hilo directo con Europa para tratar y trasladar los problemas insulares».
La Comisión NAT tiene competencias en materia de turismo, agricultura y desarrollo rural, silvicultura, producción alimenticia, salud pública, protección de los consumidores, política marítima y protección civil.
La presidenta balear ha destacado que «es un gran honor que se plantee el apoyo a mi candidatura a la Comisión NAT, que tiene competencias dentro del Comité de Regiones básicas para las Illes Balears. Creo que será muy importante esta presidencia si lo conseguimos en el momento de la votación el próximo mes de marzo porque trata temas de turismo, fundamentales para nuestra comunidad autónoma. También temas de agricultura: hay que luchar en temas de insularidad en toda aquella política agraria común que es necesaria para Balears. Y también temas medioambientales en términos más amplios y cuestiones de salud, que, para mi gobierno, son un eje transversal de nuestra política».
Defensa de enmiendas
La presidenta autonómica ha defendido en el pleno del Comité de las Regiones un paquete de cuatro enmiendas del Grupo Socialista Europeo, que propone desarrollar un turismo de calidad adaptado a las personas de edad con el objetivo de garantizar un transporte adecuado a este colectivo; fomentar el turismo de ‘salud y bienestar’ y distinguir varios grupos de este segmento turístico para identificar su problemática, estableciendo las medidas adecuadas.
La presidenta balear también ha dado su apoyo a dos enmiendas al proyecto de dictamen sobre innovación y modernización de la economía rural. Estas enmiendas quieren ayudar, mediante la innovación y la modernización, a las zonas rurales, que representan una parte muy significativa del territorio de la Unión Europea (UE).
La primera de estas enmiendas propone hacer una mención a la especificidad de las zonas rurales que se encuentran en una región insular, por los problemas añadidos a los que las Illes Balears tienen que hacer frente como consecuencia de la insularidad, como el incremento no sólo de los costes de producción (con fertilizantes y gasóleo más caros) sino también en los de mano de obra o energía eléctrica.
Esta problemática y la necesidad de su toma en consideración están reconocidos en el artículo 174 del Tratado de la UE. Con respecto a la segunda enmienda, reconoce el esfuerzo realizado por zonas rurales que para sobrevivir han tenido que transformarse y pasar de un modelo económico eminentemente agrícola a un modelo turístico rural.
Armengol ha asegurado que «en las Illes Balears hemos podido ver cómo el número de establecimientos dedicados al turismo rural se ha duplicado en los últimos diez años. Así pues, es importante que estos esfuerzos tengan el apoyo por parte de las instituciones europeas. En una región como la balear, destino turístico líder en Europa y con un PIB que se fundamenta en el sector servicios, potenciar la diversificación y el desarrollo de este sector es muy importante. Como lo es también conseguir mejorar la calidad del producto turístico que ofrecemos, si queremos garantizar el crecimiento y la competitividad de la industria en el futuro».
Según la presidenta autonómica «para las Illes Balears es de gran importancia el turismo orientado a las personas de edad, por sus valores intrínsecos y por su importante contribución a la desestacionalización». El colectivo de turistas mayores de 65 años actualmente representa el 8% del total de los turistas que visitan el archipiélago, con un gasto de 948 millones de euros.