@Noudiari / La Liga balear de Tercera División entra en su recta final -quedan 11 partidos- y hay cuatro equipos, entre ellos dos pitiusos, que se encuentran en una posición óptima para disputar el sprint definitivo por el título con un mínimo de garantías. El Mallorca B, líder de la categoría y que lleva seis partidos seguidos sin encajar un solo gol, parece que llega a este tramo concluyente de la competición más entero que sus directos en la lucha por el campeonato.
No se puede descartar tampoco al Constancia de Inca, segundo clasificado a un solo punto del primero y equipo más en forma en este momento, como demuestra el hecho de haber sumado 16 de los últimos 18 puntos que ha disputado en la Liga, la mejor racha del grupo de cabeza de Liga en las últimas seis jornadas.
Detrás de estos dos clubes se encuentran los representantes de Eivissa y Formentera. La Peña Deportiva es tercera después de ganar al Mercadal en un partido que tenía perdido en el minuto 80 (0-1) y que logró sacar adelante gracias a la casta de José Luis y la ambición de Pando, que marcó el tanto de la victoria en el minuto 89.
Liderato a tiro
Los peñistas tienen al líder a tres puntos y este último todavía tiene pasar por su campo, lo mismo que el Constancia, con lo que la parte final del torneo le es favorable en este sentido siempre y cuando sepa jugar sus bazas y no se acongoje como hizo ante el Mercadal, que estuvo mejor que el titular del campo a pesar de que acabó perdiendo.
El Formentera, vigente campeón, es el que peor lo tiene a estas alturas, sobre todo porque no depende únicamente de él mismo para revalidar el campeonato. Sin embargo, al igual que la Peña, tiene que recibir a en su domicilio a Mallorca B y Constancia.
Sin embargo, en las últimas jornadas le está costando al conjunto formenterense sacar adelante partidos ante rivales que a priori son inferiores, como le ha pasado en el terreno de juego del Platges de Calvià, donde ha empatado esta jornada (1-1).
Al contrario de sus rivales, da la impresión de que al Formentera se le está acabando la gasolina después de estar muchas jornadas en la cima de la clasificación e ir, de forma repentina, hacia abajo en la clasificación. Le queda tiempo para recuperar su mejor tomo, pero poco margen para el error cuando restan solo once jornadas para que finalice una competición que llega a su tramo definitivo cargada de emoción y todo por decidir en las cuatro primeras posiciones.