@Noudiari / El HC Eivissa y el balonmano siguen latiendo en Vila. El conjunto ibicenco ha preferido coger el camino más recto hacia la permanencia en la última jornada de la Liga y ha derrotado al Benidorm en casa por 28 a 21 con un pabellón abarrotado, con 400 personas en las gradas, que ha llevado en volandas al cuadro de Félix Mojón a la victoria.
El partido era una cuestión de honor y en eso no hay quien gane a los insulares, que han pilotado el mando del encuentro durante 60 minutos de terciopelo. Siempre han ido por delante en el marcador. Se jugaban la permanencia en la categoría y no había margen. El suspense y la paradoja han querido un final así, porque el equipo ha respondido en la competición y podría haber acabado mejor parado en la clasificación a poco que la fortuna le hubiera sonreído antes.
Las lesiones, los imprevistos y la experiencia, que es un grado, se lo han puesto complicado, pero al final el equipo y el público han confluido en la comunión perfecta que hace de este club y este deporte un referente deportivo en un municipio donde el balonmano es casi religión. Al descanso, el HC Eivissa ya tenía el toro por los cuernos (13-7) y tras la reanudación ha refrendado su postura.
Al final, el equipo, el público y la chiquillería, la cantera, han evaporado los nervios en un abrazo conjunto en el centro de la pista que evidencia las ganas de balonmano que hay en Eivissa, en la Isla, y el esbozo de un futuro prometedor de un club que quiere seguir creciendo al ritmo que le marque una cantera viva y con ganas de relevo.
de deu, campeons!!