@Noudiari/El proyecto de reforma de Marina Botafoch y el diseño de la futura estación marítima de Formentera en el muelle comercial ya cuentan con el rechazo de los grupos de la oposición del Ayuntamiento de Ibiza.
A la negativa del equipo de gobierno de Vila con respecto a los planes de Marina Botafoch para ocupar más lámina de agua, casi 10.000 metros cuadrados, para instalar un beach club y un restaurante, se suma la oposición del grupo Epic, que presentará al próximo pleno una propuesta de acuerdo para que rechazar las construcción de estas nuevas edificaciones y para que se impida la reducción del espejo de agua entre la marina y los muelles de Botafoch.
Asimismo, sobre la futura estación marítima de Formentera, Epic reclamará que no se destine ningún espacio a la creación de una galería comercial, a la vez que pedirá una explicación «clara y detallada de los eventuales usos esporádicos para eventos culturales y lúdicos que se pretenden realizar en la estación marítima de Botafoch y espacios anexos».
Perjudicará a la economía local
En el mismo sentido se ha manifestado el Partido Popular de Vila, que si bien no ha dicho nada sobre el proyecto de Marina Botafoch, sí ha cargado con dureza contra el diseño de la futura estación marítima de Formentera.
«A juicio del Partido Popular, el futuro edificio de la estación marítima bastaría para dar servicio a los usuarios, junto con los espacios de sombra proyectados a lo largo del paseo, sin necesidad de ubicar locales comerciales en la zona», denuncian.
Según los populares, «la decisión de la APB de transformar el paseo del muelle norte en un complejo comercial perjudicará a la economía local», por lo que instarán al equipo de Gobierno «a que muestre su firme oposición» al proyecto.
También reclamarán al alcalde que exprese su rechazo a la forma de actuar Autoritat Portuària, que a su juicio “facilita información sesgada al Ayuntamiento y actúa unilateralmente, anteponiendo de sus intereses económicos a los intereses de la ciudad de Eivissa y de sus vecinos y comerciantes”.
Estación marítima de Formentera
El proyecto de Autoritat Portuària prevé la construcción de la estación marítima «destinada a la venta de billetes» así como «edificaciones destinadas a usos comerciales, de diferentes dimensiones y diferentes orientaciones».
Además, contempla la construcción de zonas de juegos infantiles, zonas verdes y zonas de estancia.
Autoritat Portuària rechaza que la nueva edificación sea «un espacio único y cerrado», y se plantea que el diseño de la terminal «se desarrolle siguiendo una pérgola como generadora de unidad».
La propuesta prevé que la estructura de la terminal favorezca «la agilidad de los accesos y operaciones de embarque y desembarque» y que cuente «con espacios y superficies peatonales amplias frente su fachada principal».
También se proyectan recorridos claramente marcados desde los aparcamientos «con el fin de evitar cualquier interferencia con el flujo de vehículos y facilitar los desplazamientos de grupos de peatones en condiciones de seguridad y comodidad».
Asimismo, se contemplan dos zonas de aparcamiento. Una de ellas, cercana a la terminal para la descarga de viajeros y otra para la organización de la cola de taxis y autobuses. Resalta también la necesidad de contar con «aceras generosas en su fachada principal para evitar cualquier interferencia con el flujo de vehículos».
El viario frente la terminal dispondrá de una zona destinada a la cola de taxis y los autobuses en espera. En la isleta central se dispondrá de un aparcamiento con capacidad mínima de 120 turismos y 6 autocares.
Un plazo de ejecución de cinco meses
Por otro lado, también es de interés para el ente portuario que la nueva edificación pueda ser utilizada de forma esporádica para usos alternativos como puede ser la realización de eventos, culturales y lúdicos.
El plazo de ejecución de los trabajos es de cinco meses contados a partir de la firma del contrato. Como plazo parcial se estiman dos meses para la realización del proyecto básico y el estudio de dimensionamiento de superficies y operaciones. Una vez estimado y conformado por parte de la APB, el proyecto constructivo (incluyendo la campaña geotécnica) se deberá redactar en un plazo máximo de tres meses.
El proyecto indica que en el caso de que, debido a causas ajenas a la APB y al adjudicatario, no se pudiera finalizar los trabajos en 5 meses, el contrato quedará prorrogado hasta la finalización de los mismos.
Amarres para flota local en Botafoch
Por otra parte, sobre el proyecto de Marina Botafoch, Epic también reclamará que se eliminen o minimicen el efecto físico y visual de las vallas que separan el paseo marítimo de la marina, y que se modifique la planta de amarres, «claramente enfocada a esloras superior de 12 metros».
El objetivo de esta petición es que «no se deje sin amarre a la flota local» de pequeñas eslora, que según Epic, son la mitad de los amarres de la planta actual, y están ocupados «por titulares de derecho de uso y amarristas residentes en Ibiza, en su mayoría».
«En este último apartado, es importante recordar que la marina seca planeada no podrá acoger a una gran parte de los barcos actuales debido a su tipología, como por ejemplo veleros, ya que sólo es apta para lanchas de menos de 9 metros», aclara Epic, que además considera «fundamental» que se verifique el impacto de la marina seca proyectada, que se prevé de hasta 11 metros de altura.