@Noudiari/ La embarcación ‘Ruah’, desde la que se lanzó la bengala que el pasado fin de semana provocó el incendio que calcinó casi una hectárea de sabinar en la isla de s’Espalmador, ya está en Valencia, después de que la Guardia Civil requiriera al armador del barco para que designara a un comandante que trasladara el buque desde Ibiza hasta la ciuedad levantina, donde permanecerá amarrado e inmovilizado a cargo de las autoridades hasta que llegue el momento de la celebración del jucio.
La embarcación llegó a Valencia alrededor de las 13.10 hs. de este sábado, capitaneada por el comandante Stefano Manzoli. Cabe recordar que el juez titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Ibiza, Santiago Pinsach, encargado del caso, decretó la inmovilización del barco con el fin de hacer frente a una posible responsabilidad civil a raíz del incendio.
Ahora el buque ha quedado amarrado e inmovilizado en un puerto deportivo de la ciudad levantina, donde la Guardia Civil ha procedido al precinto del timón a la espera de que se celebre el juicio por incendio forestal por imprudencia, que sentará en el banquillo tanto al italiano de 43 años que lanzó la bengala como al capitán el barco que se encontraba a bordo cuando ocurrió el incendente.
El comandante Manzoli ha explicado a Nou Diari que se hicieron cargo del barco «el viernes por la noche y ya subimos a bordo, esta mañana (sábado) salimos de Ibiza alrededor de las 7 de la mañana escoltados por un barco de la Guardia Civil que nos acompañó casi hasta la costa de Valencia. Cuando estábamos a unas 40 millas otros agentes de la Benemérita de la Comunidad Valenciana cogieron el relevo y nos acompañaron hasta llegar a tierra».
El viaje, según ha explicado Manzoli, «ha transcurrido sin incidentes, hacía buen tiempo y hemos navegado a unos 15 o 16 nudos de velocidad y el buque ha llegado a puerto en perfectas condiciones».
A la espera de juicio
El comandante encargado del traslado ha detallado que recibió el encargo por parte de los propietarios del barco a quienes se les requirió para que lo llevaran hasta Valencia para dejarlo amarrado y a cargo de las autoridades a la espera de que se celebre el juicio, en el que deberán pesonarse tanto el hombre que lanzó la bengala que desató el incendio como el capitán que iba a bordo cuando comenzó todo.
En el primer caso, el acusado de lanzar la bengala asumió la culpa aunque durante su declaración ante el juez explicó que se trató de un hecho fortuito y accidental. El capitán del barco, por su parte, declinó toda responsablidad ante el juez asegurando que dejó de estar al mando de la embarcación un día antes de que ocurriera el suceso.
Para ninguno de los dos se han decretado medidas cautelares, por lo que ambos pueden volver a su país, si bien, según ha explicado el abogado de ambos, Danielle Mundula, están dispuestos a colaborar con la justicia y se personarán en el juzgado tan pronto como sean requeridos. Podrían enfrentarse a penas de hasta 5 años de prisión si finalmente se les considera culpables de un delito de incendio por imprdencia al tratarse de un espacio protegido de alto valor paisajístico.