@Noudiari / La caída de cascotes a la vía pública como consecuencia del desprendimiento de un alero de un edificio que hace esquina entre las calles del Llinquer y Cap de Martinet, en Jesús, se ha saldado esta tarde sin heridos, aunque las consecuencias pudieron ser más graves.
Justo debajo del edificio se encuentra la terraza de un bar, aunque los clientes se apartaron a tiempo y no hubo que lamentar daños personales. El alero, de un metro y medio de ancho y otro metro y medio de largo, se desprendió poco antes de las 17.00 horas, cayendo encima de las mesas y sillas del establecimiento.
Los bomberos acudieron hasta el lugar con dos camiones, uno de ellos con un brazo articulado, para retirar los cascotes y picar la pared para sacar los restos, así como realizar labores de saneamiento, tarea en la que emplearon cerca de una hora.