@Pablo Sierra del Sol / No hay que hacerle muchas preguntas a Tito García Sanjuán para darse cuenta de que es más menottista que bilardista, que prefiere el buen juego como camino para conseguir resultados positivos a la especulación. Para el maño, enfrentarse al Sevilla en la Copa del Rey ha significado la oportunidad de conocer a Jorge Sampaoli y Juanma Lillo, entrenador y ayudante del pentacampeón de Europa League, dos ejemplares de esa escuela futbolística, ideológica y filosófica que creó El Flaco Menotti allá por los setenta. «Lillo es el mentor de Guardiola, que es mi ejemplo desde que empecé a entrenar. Sampaoli bebe directamente de esa corriente argentina, ya me encantaba con Chile, donde mezclaba el buen fútbol con una intensidad física fuera de lo común. Hablar con ellos un rato es aprender muchísimo de fútbol. Basta con ver todas las variantes que usaron en el partido que jugamos en la isla. Se están portando muy bien con nosotros, todo son facilidades desde que llegamos a Sevilla», explica el entrenador de la SD Formentera.
Para el técnico, el encuentro de mañana será el partido más importante desde que es entrenador de fútbol. «Sin duda, es el partido de nuestras vidas», dice. Como aficionado no puede olvidarse de la final de la Recopa del 95, cuando su hermano Jesús levantó el título en el Parque de los Príncipes de París con el Zaragoza minutos después de que Nayim colara aquel torpedo increíble en la portería de Seaman. Como jugador de fútbol sala en la memoria queda la final de la Copa de Europa ganada con el CLM Talavera en 1998 durante los años dorados de este deporte en España. Pero como entrenador nunca se ha visto García Sanjuán en un escenario como el Sánchez Pizjuán. Quiere disfrutar la ocasión, pero no se onnibula con las campanillas de Primera División. Rozar la gloria no significa instalarse en ella y el entrenador del Formentera es tajante: «Cambiaría lo que va a ocurrir mañana por el ascenso a Segunda B».
García Sanjuán cree que el equipo ha respondido a las mil maravillas durante la primera vuelta y que entrar en playoff ya no es el único reto. El aragonés considera que deben pelear por el título de Tercera y para ello no le vendría mal algún refuerzo para completar una plantilla «fantástica, llena de gente comprometida como Agus, que ha jugado en varias posiciones que no son la suya», pero a la que le iría de perlas un lateral derecho y un extremo que pudiera hacer daño a la contra. Tras el duelo contra el Sevilla, donde lo deportivo queda en segundo plano después de la goleada de la ida, los directivos del Formentera deberán decidir si fichan a algún sub-23 aprovechando el dinero ingresado en la Copa del Rey o ahorran para el futuro.