@Pablo Sierra del Sol / Nunca un equipo había ganado la Liga Interpueblos con tanta solvencia. Tampoco nadie había dispuesto de una plantilla tan profesionalizada y con tanta calidad como la que ha entrenado hasta hace unas horas Juan Ibáñez, Buti, en la Unión Deportiva Ibiza. Pero pese a la diferencia de nivel con sus rivales en la Regional ibicenca, la faena del preparador castellonense, afincado en la isla desde hace más de diez años, se puede valorar positivamente si nos fijamos en la estadística: 20 victorias (18 consecutivas en las primeras 18 jornadas), la friolera de 97 goles a favor y solamente trece en contra en 22 partidos jugados. Sin embargo, la directiva esperaba recibir mejores sensaciones de la UD Ibiza y, por eso, los dirigentes del club se desplazaron ayer a la isla desde Valencia para comunicarle a Buti que ni él ni Juanma Mulió, su segundo entrenador, iban a continuar en la entidad.
«Creen que el equipo ha bajado el rendimiento en la segunda vuelta. Las derrotas contra el Formentera B y el Inter Ibiza, cuando ya teníamos ganado el título, han influido para destituirnos. Ahora solamente cabe respetar la decisión y desearles toda la suerte del mundo. Quiero que los que han sido mis jugadores suban a Tercera División esta temporada», ha explicado Buti, sin perder la elegancia en ningún momento de su discurso. Para el entrenador han sido unos meses muy satisfactorios al frente de un equipo diseñado para el ascenso y con potencial suficiente para competir con solvencia en una categoría superior. «Lo que nos ha pasado es anormal en el mundo del fútbol ibicenco», ha dicho Buti, «pero está a la orden del día en categorías superiores. Los dirigentes tienen una mentalidad muy profesional y están buscando a gente que se ajuste más al perfil que ellos prefieren». Esta misma semana estuvo presente en el sorteo del calendario de la Preferente y había comenzado a estudiar a los cinco rivales que se encontrará el Ibiza en el tramo de competición que da acceso al playoff de ascenso.
«Irme del Ibiza no me va a quitar el mono de fútbol. Me gustaría volver a entrenar cuando surja una buena oportunidad, pero soy paciente, no quiero precipitarme. Cuando alguien nos llame, nos pondremos al teléfono», ha dicho el entrenador. Su sustituto se conocerá próximamente y, lo más probable, es que sea valenciano, como Amadeo Salvo, antiguo accionista mayoritario del Valencia CF y presidente de la entidad vilera. En su cuerpo técnico, el nuevo míster del Ibiza seguirá contando con el entrenador de porteros, el preparador físico y el delegado que han acompañado a Buti y Mulió desde que comenzó esta aventura el pasado 2 de agosto.
Para ascender (objetivo único e inexcusable de Salvo), sus sustitutos se tendrán que enfrentarse a la maldición de Radomir Antic, el único caso equiparable en el imaginario futbolístico a lo que ha sucedido en el club de Can Misses. El serbio fue campeón de invierno con el Real Madrid en la 91/92, pero Ramón Mendoza decidió cesarle con el equipo líder porque el juego de los blancos no satisfacía a la grada del Bernabéu. Aquel Madrid, entrenado por Leo Beenhakker, acabó regalándole el título liguero al Barça del Dream Team en uno de los famosos finales ligueros de Tenerife.
Normal…muy flojito este entrenador… Para un regional o juvenil del Puog den valls sirve, con todos mis respetos…
El está allí entrenando por su relación con Darder, las comidas y llamadiste han servido hasta que se ha puesto seria la cosa…
Força Eivissa
Clar, perdre dues vegades en tota sa lliga és una vergonya! De què va aquesta directiva?