@Pablo Sierra del Sol / Un grupo de madres concienciadas por las dificultades asistenciales que sufren los menores con necesidades especiales en ámbitos como la educación han fundado recientemente APIES, siglas de la Asociación Pitiusa por la Inclusión Educativa y Social. La presentación de este colectivo tendrá lugar esta tarde (a partir de las 19 horas) en la delegación ibicenca de la UIB.
Durante el acto intervendrán el especialista en educación inclusiva Nacho Calderón Almendros y Pepita Costa, la presidenta de la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos de Eivissa. Por su parte, Faustina Hanglin e Irene Ripoll, las máximas responsables de APIES darán a conocer públicamente los objetivos de la reciente asociación. Entre estos retos destaca la inclusión educativa de estos menores en una época de recortes que agrava la dependencia y predispone a la marginación social.
Situación desigual entre escuelas
«En Ibiza la situación es muy desigual entre centros educativos. Influye mucho la sensibilización sobre esta realidad de sus equipos directivos», explica Hanglin, que dice que uno de los propósitos de APIES es reivindicar que se eduque a estos niños «sin desvincularlos de su área ordinaria», ya que recurrir a las aulas conocidas como UECCO supone recluirlos en guetos que les discriminan. Comprometidas con la dignidad y con una línea de trabajo honesta, las responsables de APIES intentarán «tejer redes de colaboración con colectivos similares que ya existen en Mallorca».
Hanglin tiene claro que esta asociación puede actuar de salvavidas orientativo para las familias con estas realidades «que no sepan qué hacer ni dónde acudir, ya que las necesidades especiales se detectan muy rápido en los hijos, bastante antes de que puedan ser escolarizados a los tres años».
Reivindicaciones ante la conselleria d’Educació
«Sabemos que las competencias en Educación no están transferidas y, aunque hemos establecido contacto con el Consell para que sean conscientes de esta realidad soterrada, sabemos que ellos poco pueden hacer desde esa institución. Por eso ya nos hemos reunido con Marga Ferrer, la delegada de la conselleria d’Educació en Ibiza, a la que hemos presentado una lista de peticiones. Ella, al fin y al cabo, es una portavoz. Por eso queremos ir a Mallorca a medio plazo para explicar la dura realidad, tanto para las familias como para los docentes, de educar a un niño con necesidades especiales en un lugar como esta isla, donde no abundan los recursos precisamente», comenta Hanglin.
Otro de los temas importantes que APIES quiere poner en el centro del debate es la creación en Ibiza de unos módulos de Formación Profesional adaptados a personas con diversidad funcional. Hanglin y sus compañeras entienden que estos estudiantes tienen derecho a optar a titulaciones donde puedan desarrollar al máximo sus capacidades para que puedan acceder al mercado laboral. Desde la asociación tienen claro que relegar a estas personas a una «educación especial» totalmente segregada significa «excluirlas y discriminarlas».
Este colectivo también organizará talleres y charlas tanto informativos como reivindicativas. Su presencia ya se ha dejado notar en la calle: el pasado fin de semana, APIES participó en la fiesta de la Educación que se celebró el pasado domingo en Vila.
Soy miembro de la Junta de APIES, y para nada solicitamos la creación de más aulas UECCO.
Al contrario, buscamos la integración real de los niños con discapacidades, ver con naturalidad estos pequeños en aulas ordinarias.
Sería un detalle modificar el texto, que no nos representa.
Gracias.