@Noudiari / El Ilusions Pool se ha proclamado brillante campeón de la Ibizan Pool League 2016-17. El equipo formado por Manuel Rubio, Tomás Sánchez, Óscar Marí, Gabriele Crovetto, Sergio Correa, David Sala, Tomás Megías y Rolando ha llegado y besado el santo en su primera participación en este torneo. Los ‘ilusionistas’ finalizaron la competición con un balance de 58 puntos, 19 victorias y una derrota, encajada contra The Ship por 5-4.
El único conjunto de Vila en el torneo, que contó con 11 escuadras sanantoenienses, principalmente pobladas por billaristas británicos, acabó la liga con un balance de 110 partidas a favor en el ‘average’ particular, superando así el récord de 100 establecido por los Boulevard Spaniards la temporada pasada.
La segunda plaza del torneo fue para The Ship, con 53 puntos, 17 triunfos, tres reveses y 54 partidas a favor en el ‘average’. Los Boulevard Spaniards, campeones el año pasado, acabaron terceros con 47 puntos.
El trofeo de mejor jugador de la Ibizan Pool League 2016-17 fue destinado a Tomás Sánchez. El jugador del Ilusions Pool, que ganó la liga por cuarto año seguido tras jugar las tres anteriores campañas con el Boulevard, acabó la competición invicto y, por tanto, con un 100% de victorias al vencer las 18 partidas individuales que disputó. Es la segunda vez que se entrega este premio y el segundo que se apunta Sánchez, que el curso pasado también lo conquistó.
La organización de la Ibizan Pool League, que corre a cargo del diario Ibiza Sun con la ayuda de Jack Wharrie, organizó también una copa individual a lo largo de la temporada. Se apuntaron 30 jugadores con un precio de inscripción de 10 euros destinados a obras sociales. El campeón fue Danny Graham, de los Boulevard Spaniards, que se impuso en la final a Gary Cannon, de The Ship, por 5-2 en el Café-Bar Ilusions Pool, escenario de la fiesta final de temporada este Jueves Santo.
Durante la ceremonia de entrega de premios también se galardonó al segundo y tercer clasificado del ranking de mejor jugador, que fueron David Sala y Jason Martensz, respectivamente; un trofeo al subcampeón copero; y un diploma tanto para el equipo Flaherty, por su espíritu deportivo en una competición en la que no sumó ninguna victoria, y para The Ship, por haber sido el único conjunto capaz de batir al campeón.