@Noudiari/ El Tribunal de la Corona de Cardiff ha condenado a Nicholas Strange, de 34 años y nacionalidad británica, a diez años de prisión por tráfico de drogas y blanqueo de capitales.
Strange, que fue detenido en mayo de 2016 en Ibiza por la Guardia Civil, está considerado como el líder de un grupo de crimen organizado que traficaba con drogas y dinero entre la isla y Gales, según ha informado la Embajada británica en Madrid. Según han señalado, el ahora detenido se encargaba de obtener cocaína del sur de Gales que luego vendía en Ibiza su padre, Neil Strange.
Los policías británicos descubrieron el papel de Nicholas Strange después de arrestar, en 2014 en Bristol, a su padre y a su socio, Martyn Pagett, de 31 años. En esta operación, los agentes recuperaron 125.000 libras y ocho kilos de cocaína de gran pureza con un valor potencial en el mercado de casi un millón de libras. Su padre está en prisión cumpliendo una condena de ocho años y medio por tráfico de capitales.
El agente de la policía británica National Crime Agency, John Lewis, ha tildado a Strange de ser un “criminal” que se quedaba “en la soleada Ibiza y mantenía sus manos limpias mientras su padre hacía el trabajo sucio”. “Gracias a nuestra información y a los estrechos vínculos con la Guardia Civil ha caído sobre él todo el peso de la ley”, ha añadido Lewis.
El embajador británico, Simon Manley, por su parte, ha señalado de “excelente noticia” el ingreso en prisión de Strange y ha calificado de “fantástica” la relación entre las fuerzas de seguridad españolas y británicas. «Estoy seguro de que esa cooperación se va a mantener e incluso reforzar en el futuro”, ha apuntado.
Strange fue condenado por el Tribunal de la Corona de Cardiff el 26 de mayo después de declararse culpable de suministro de drogas y de blanqueo de capitales.