@Noudiari/ El informe de la Comisión Permanente de Investigación de Siniestros Marítimos de la Marina Mercante concluyó que el rumbo erróneo tomado por el buque ‘Don Pedro’, el 11 de julio de 2007, se debió a un «posible lapsus» por la creencia inicial de que el siguiente puerto de destino era Palma de Mallorca, debido a la cantidad de veces que realizaba el buque dicho trayecto. De ahí que hubiera habido una «confusión y/0 un exceso de confianza de la tripulación».
Además, la Comisión Permanente de Investigación de Siniestros Marítimos apunta también la «inadecuada o inexistente planificación del viaje, dado el carácter repetitivo de los viajes que efectuaba el buque».
Según el informe, que analiza en 90 páginas todos los detalles del trayecto que realizó el carguero ‘Don Pedro’ desde la bocana del puerto hasta colisionar con Es Daus y su posterior hundimiento, señala que el choque se debió a que el rumbo de 180 grados se puso de forma tardía y cuando ya no era posible esquivar el islote de Es Daus. En este punto señala que la tripulación no realizó la maniobra correctiva a tiempo debido a la «inexistente vigilancia, verificación y visualización de la derrota prevista». Asimismo, apunta a una posible «fatiga» del capitán, debido a la sobrecarga de horas de trabajo que comportan los tráficos de línea regular de trayectos de corta distancia y repetitivos.
Finalmente, el informe señala que esa maniobra para corregir el rumbo se pudo dar también porque en aquel momento no se encontraba ni el capitán ni el segundo oficial en el puente de mando.
Buen tiempo y sin fallos mecánicos
En el documento se destaca que el día del accidente, las condiciones meteorológicas eran buenas así como que no existía en la zona de tránsito otros buques, «ni obstrucciones que impidiesen efectuar una derrota directa desde la salida hasta el siguiente cambio de hacia el puerto de destino».
Además, desde la Comisión Permanente de Investigación apuntan que no hay constancia de que se produjera ningún fallo mecánico y que las ayudas a la navegación funcionaban perfectamente.
Por ello, constata que una vez que el práctico del puerto de Vila desembarcó del ‘Don Pedro’, el buque comenzó a caer a babor y continuó cayendo a babor tras pasar el espigón, «sin que, de acuerdo con la derrota necesaria para efectuar el viaje, nada de ello fuera necesario y sin que existiera otra causa que lo justificara».
Finalmente, el documento señala que no se realizó una planificación del viaje «adecuada» o, por lo menos, no consta que se aplicara.
El informe completo puede consultarse en este link.
Durante el día de hoy, han declarado en el juicio varios empresarios perjudicados que han relatado, uno a uno, las pérdidas económicas alcanzadas tras el cierre de las playas debido a la llegada de fuel.
Durante el día de mañana, comparecerán ante la titular del Juzgado de lo Penal número 1 los peritos. La última sesión del juicio probablemente se produzca el día 17 de octubre, cuando se espera que declare el primer oficial del buque ‘Don Pedro’ como testigo, que ha sido reclamado ya en tres ocasiones.