@Noudiari/ El Ayuntamiento de Santa Eulària contará el próximo ejercicio con un presupuesto de 38,73 millones de euros, un 2,95% más que el 2017.
Estos presupuestos, que han presentado el alcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, y el concejal de Hacienda, Pedro Juan, deberán ratificarse en la sesión plenaria del próximo 5 de diciembre.
Desde el Ayuntamiento han destacado que éstas cuentas municipales destinan uno de cada tres euros a servicios básicos de atención a las demandas ciudadanas de protección para los desfavorecidos, seguridad y limpieza.
Para el primer edil, con estos presupuestos se prevé continuar la dinámica de los ejercicios anteriores «de servir para la dinamización social y económica del municipio». «Éstas cuentas son una muestra de lo que queremos para nuestro municipio, un espacio más sostenible, social y medioambientalmente», ha añadido.
Los presupuestos para 2018 incluyen un gasto de 13,5 millones «a las partidas que afectan a las cuestiones que más nos demandan los ciudadanos ya que lo que más quieren nuestros vecinos es dar cobertura a las personas desfavorecidas, garantizar al máximo su seguridad y tener el municipio lo más limpio posible «, ha asegurado Marí.
Atención Social y Fomento del Empleo
Así, el próximo año las partidas de Atención Social y Fomento del Empleo pasarán de suponer 2,10 a 2,5 millones, una evolución que representa casi un 18% de incremento. «Estas actividades son fundamentales para nosotros porque implican ser más solidarios y darle más oportunidades a la gente», ha apuntado Marí, quien ha recordado que el Consistorio, además de las actividades que desarrollan los Servicios Sociales municipales, también cuenta con una escuela de Formación, el Club de Trabajo, y el Servicio de Atención a la Vivienda.
En cuanto a gasto en seguridad, el presupuesto crece un 3% hasta alcanzar los 3,91 millones con la previsión de cubrir diferentes bajas de larga duración y mantener una cobertura lo más amplia posible de las necesidades en esta materia.
Por último, Marí ha destacado el gran esfuerzo que se hace para tener el municipio en las mejores condiciones de limpieza posibles, tratando de facilitar al máximo a los ciudadanos su colaboración en mantener limpia Santa Eulària. Así, las partidas en recogida de basuras, gestión y tratamiento de residuos y de limpieza viaria suman 7,10 millones (casi un euro de cada seis del presupuesto), un 4% más que el año pasado.
Inversiones y reducción de deuda
En cuanto a inversiones, este año se gestionarán cerca de 12 millones ya que buena parte de las inversiones sostenibles aprobadas los últimos meses se deberán ejecutar el 2018 y habrá otros seis millones para otras actuaciones entre las que destaca la previsión de un millón de euros para iniciar la construcción de los vestuarios y las instalaciones multiusos de Santa Gertrudis o la reserva de 500.000 euros para financiar la construcción de la ampliación del colegio de Sant Carles que el Govern no asumirá en un primer momento.
Estas dos intervenciones, al igual que la reforma de la carretera y carril bici de Es Canar (650.000 euros), o el Centro Juvenil de Jesús ‘Can Sènia’ (400.000) son inversiones plurianuales que suman 2018 un total de 2 , 55 millones, pero que cuando estén terminadas deberán representado un total de 8,6 millones.
Otras intervenciones que se prevén ejecutar sólo en un año son el depósito de Jesús (1,1 millones, de los cuales el Ayuntamiento aportará 0,55 y el resto la Agencia de Turismo de las Islas Baleares) o la ampliación del local de la Tercera Edad de Santa Gertrudis (200.000).
Todas estas actuaciones se contemplan con recursos propios del Consistorio, sin abordar nuevos préstamos. De hecho, si la deuda del Ayuntamiento a 1 de enero está situada en 10,08 millones, a finales de año se prevé que baje a 8,21 millones.
Menos impuestos
En cuanto a los ingresos, destacan dos hechos. Por un lado, se mantiene el esfuerzo del Consistorio para reducir la presión fiscal de los vecinos de Santa Eulària donde el Ayuntamiento tiene posibilidad de hacerlo. De este modo, se sigue rebajando el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de forma que el tipo impositivo que se aplica a los pisos urbanos pasa de 0,45 a 0,42, muy cerca del límite legal fijado por el estado y situado a 0,40. En los caso de las fincas rústicas, el tipo impositivo pasa de 0,50 a 0,49, bajando por primera vez.
El segundo hecho destacable es que la mejora en general de la situación económica permite prever un incremento de los ingresos en el apartado de tasas, precios públicos y otros.