@Noudiari / Amics de la Terra valora favorablemente el anteproyecto de ley de residuos y suelos contaminados de las Islas Baleares, pero ha presentado varias alegaciones de mejora, según informan.
Han presentado varias alegaciones al texto del anteproyecto de Ley, que consideran un paso importante hacia la reducción de residuos, sobre todo los plásticos, y su correcto tratamiento. «Las medidas propuestas en la nueva ley son ambiciosas y no cumplen sólo con la legislación actual estatal y europea, sino van más allá, avanzando las propuestas que actualmente se debaten a nivel europeo, tanto en el ámbito de tratamiento de residuos como en el de economía circular», explican en un comunicado.
Una de las críticas que hace Amics de la Terra es la «carencia de medidas» que propone la ley respeto el impacto que la gestión y tratamiento de los residuos tiene en la producción de emisiones de gases de efecto invernadero. Considera que esta omisión está en contradicción con la nueva Ley de Cambio Climático, en su punto de salir a exposición pública, «que presumiblemente hace mucho énfasis en las emisiones provocadas por cada sector y la gestión y tratamiento de residuos producen gran cantidad de emisiones entre transporte y tratamientos», explican.
Uno de los aspectos que consideran positivo, es que los municipios pueden poner en marcha entre sus competencias el tratamiento de la fracción orgánica, evitando así el transporte de materiales y los consumos y las emisiones que se derivan. La asociación ecologista propone que «no se limite esta posibilidad sólo a los ayuntamientos, sino que se abra esta posibilidad a las empresas, labradores y colectivos, que tienen capacidad y voluntad de hacer compuesto localmente en planta pequeña».
Piden la retirada de la disposición transitoria primera, porque puede hacer inviable esta posibilidad porque condiciona la puesta en marcha de las plantas nuevas al equilibrio económico o financiero de las concesiones administrativas vigentes. Con esta condición Amics de la Terra piensa que las concesionarias actuales pueden dificultar las nuevas iniciativas que le puedan hacer la «competencia».
Recalcan la importancia de la recogida selectiva de la materia orgánica domestica para obtener un compostaje de buena calidad que puede servir como adobo para la tierra, muy pobre en materia orgánica en los países del mediterráneo.
También piden que la nueva ley apueste firmemente por la instalación de los sistemas de depósito, devolución y reciclaje de los envases de bebidas, que tiene tan buenos resultados en otros muchos países para reducir los envases abandonados, y no traslade la decisión de su implantación a los Consells Insulares. Actualmente la recuperación de los envases usados se sitúa en 30-40%, mientras que en países con un sistema de depósito y reciclaje, la recuperación de envases sube a 95%.
Respecto a la importación de residuos para eliminar en las Islas, piden que se prohíba no sólo para el tratamiento en plantas públicas como propone el texto de la ley sino en plantas privadas. «Y en el caso del traslado de residuos a otras comunidades autónomas que este no implique una ampliación de las infraestructuras existentes», señalan.
«Otro punto conflictivo se trata de la transparencia económica de las empresas concesionarias de tratamiento de residuos en las Islas Baleares», apuntan y proponen añadir un artículo para que las empresas que gestionan los residuos domésticos, sanitarios, peligrosos, etc. en las Islas Baleares, «tengan la obligación de presentar anualmente un resumen de sus beneficios/pérdidas, que será público y fácil de entender por parte de los ciudadanos que pagan este servicio mediante las tasas municipales», finalizan.