@Noudiari / Según el Ministerio de Relaciones Exteriores británico, los jóvenes británicos que trabajan como relaciones públicas y camareros en bares de Mallorca son víctimas de una «nueva forma de esclavitud».
Se ha hecho eco de esta información el diario The Times en su versión británica y asegura que: «Viajan a España con la promesa de vivir la fiesta de Magaluf y muchos de ellos se encuentran con jefes que les requisan el pasaporte y les cobran alquileres elevadísimos en pisos sórdidos y cobran poquísimo».
Las acusaciones crecen al asegurar que las mujeres son sometidas de manera habitual a abusos sexuales por parte de los clientes que ellas mismas tienen que atraer al bar, además de maltratadas e intimidadas. «Algunas se han visto obligadas a trapichear con drogas y han desarrollado problemas con el alcohol», asevera The Times. «Pocas han acudido a las autoridades al encontrarse en situación irregular de trabajo y por miedo a represalias».
El problema sale a la luz cuando Lloyd Milen, el consul británico en Mallorca, descubre que de los 25 presos británicos, 20 son relaciones públicas de bares.
La Foreign & Commonwealth Office (FCO) inició una investigación el año pasado infiltrando entre los relaciones públicas a agentes criminólogos. «Las condiciones laborales en las que se encontraban trabajando estos RP británicos es un ejemplo de esclavitud moderna», afirman un portavoz de FCO quien además aseguró que esto puede estar pasando en otras zonas de ocio parecidas a Magaluf.
EL FCO avisa que la Policía Nacional está informada de esta operación.