@D.V./ El proceso que inició el pasado lunes el Ayuntamiento de Eivissa para ocupar de manera efectiva las viviendas de sa Penya afectadas por el plan de expropiación, no se está cumpliendo con el ritmo ni la efectividad previstas. Así, ayer por la tarde, el concejal de Urbanismo de Eivissa, Alejandro Marí, admitía que sólo se han podido desalojar 13 de las 26 viviendas que han visitado: “La mayoría de los okupas no han querido firmar las actas y se han negado a abandonar sus infraviviendas”. De hecho, la mayoría de las 13 viviendas que se han recuperado ha sido porque éstas ya se encontraban vacías.
Esta negativa a abandonar su domicilio es explicada claramente por Anastasio Garcia, vicepresidente de la Asociación Cultural Gitana que agrupa a los gitanos afectados por los desalojos: “Nosotros pedíamos otra vivienda, y no nos han dado nada”, y asegura que, a pesar de no tener papeles que demuestren su propiedad, sí que tienen unos derechos adquiridos.
En el caso de aquellos que sí son propietarios de sus viviendas, la opción de trasladarse a las VPO de Can Cantó que les ha ofrecido el Ayuntamiento tampoco les seduce. Un ejemplo es el de Sebastián Navarro, un hombre en silla de ruedas que vive con sus mujer, sus hijos y sus sobrinos: “Somos ocho en casa y me han ofrecido una vivienda con sólo dos habitacions y, además, es un piso que no està adaptado para mi invalidez”.
Intentará negociar otra vez con los okupas
La negativa de lo okupas ha abandonar su domicilio supone un nuevo retraso del plan municipal de rehabilitación de sa Penya. Conseguir que los okupas desalojen definitivamente sus infraviviendas no será fácil ni rápido. El concejal de Urbanismo, Alejandro Marí, afirma que se iniciará el proceso administrativo y se requerirá a los juzgados para que se efectúe el lanzamiento de los okupas, pero que el Ayuntamiento de Eivissa hará todo lo posible para evitar que los desalojos se realicen por la fuerza: “No queremos que se produzcan escenas desagradables, por lo que iniciaremos una nueva ronda de negociaciones con los okupas”.
De momento, ya se ha actuado sobre las 13 viviendas sobre las que se ha podido recuperar el control: se han desmontado los lavabos, se han retirado los contadores de la luz y se han tapiado los accesos para evitar nuevas reocupaciones.
Marí ha insistido en que “las puertas de los servicios sociales del Ayuntamiento están abiertas” para todos los okupas, y que están dispuestos a llegar a un acuerdo sobre las ayudas para realojar a todos los vecinos. En caso de no producirse un acuerdo, el proceso administrativo puede llegar a ser largo: “Honestamente, soy incapaz de ponerle una fecha”, ha admitido el concejal.
Y EL PP NO CONSIGUE QUE MARIENMA ABANDONE EL AYUNTAMIENTO DE EIVISSA
Y EL PP NO CONSIGUE QUE MARIENMA ABANDONE EL AYUNTAMIENTO DE EIVISSA