EFE / Un total de 608 de los 629 inmigrantes del Aquarius han solicitado el asilo hasta hoy, fecha en el que expira el permiso de estancia de 45 días que el Gobierno les otorgó por razones humanitarias, mientras que para 15 se iniciarán los trámites para su expulsión en aplicación del régimen general de extranjería.
A bordo del Aquarius llegaron también a Valencia el pasado 17 de junio otros 71 ‘menas’ aunque, según han explicado a Efe fuentes del Ministerio del Interior, existen dudas sobre la edad de cinco; de ellos, dos están pendientes de recibir el decreto de la Fiscalía sobre su mayoría de edad y los otros tres que ya lo tienen lo van a recurrir.
No obstante, las fuentes de Interior recuerdan el «colapso» que padece la Oficina de Asilo y Refugio (OAR).
De hecho, el propio ministro Fernando Grande-Marlaska subrayó en su primera comparecencia en el Congreso a principios de julio que está «en una situación lamentable», tanto de recursos humanos como tecnológicos para atender las solicitudes pendientes por los crecimientos que se están produciendo en los dos últimos años.
En todo caso, los 608 inmigrantes que han expresado su deseo de ser protegidos tienen garantizada su permanencia en España hasta que se resuelva su petición, salvo reclamación de otro país de la UE o de un Tribunal Penal Internacional.
Para aquellos cuya resolución sea positiva, se abrirá un periodo de integración de entre 6 y 18 meses en el que permanecerán acompañados por una ONG.
Mientras, la autorización de estancia legal de los que tengan una resolución desfavorable o no hayan reclamado asilo expira, por lo que la Policía Nacional podrá iniciar los trámites para expulsión contemplados en la Ley de Extranjería. En algunas ocasiones, estos inmigrantes son ingresados en Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE) hasta que son deportados.
De los inmigrantes del Aquarius, 486 están protegidos por el sistema estatal de acogida, aunque el resto goza del mismo régimen de libre movimiento que los demás.
La mayoría de estas personas acogidas están en centros de la Comunidad Valenciana, donde permanecen un total de 169; 75 lo están en Andalucía, 26 en Murcia, 22 en Aragón, 19 en Madrid y otras tantas en Navarra, 16 en Baleares, 15 en Cataluña, 14 en Castilla y León, 10 en Galicia y otras 10 en el País Vasco, 6 en Extremadura, 5 en Cantabria y 2 en Castilla-La Mancha.
Además, 78 ya han sido trasladados a Francia, y otros dos lo serán una vez reciban el alta hospitalaria.
No creo que ninguno consiga quedarse, ni en España, ni en la UE. No es nada fácil, demostrar (y tengo entendido que tienen que hacerlo), que sus vidas corrían peligro de muerte en sus países de origen por motivos políticos. Hace años, antes de las guerras de Siria, Libia etc. «cuando se hablaba de estas cosas por la tele», cosa que parece que ahora no interesa, recuerdo que se decía que se le pedía a la persona, primero, su perfecta identificación, mediante documentos, y además, toda suerte de documentos, como recortes de prensa o de otra índole, en la que se viese, que esa persona, estaba siendo buscada por fuerzas hostiles, y que por ello, había tenido que huir, pues el sistema político de su país, no garantizaba su seguridad, o era justamente el propio sistema el que lo buscaba, y había fundadas razones para sospechar que no tendría un juicio justo.
Las posibilidades de que una de estas personas reúna todos los requisitos para conseguir el estatus de asilado, y mucho menos, de refugiado, son prácticamente, nulas.
Todos ellos, son, con casi total probabilidad, migrantes económicos. No sé cuándo aprenderán, que en Europa, existen unos cauces legales que hay que cumplimentar para venir a buscar trabajo… Otros, simplemente, llegan en avión, en clase turista. Es lo más común. Luego se quedan, intentando regularizar su situación. Si se quiere acceder a España, o a cualquier otro país de la UE, ese es el mejor sistema, y el más empleado. Pero desde luego, coger una balsa, y lanzarse al mar, pagando un buen dinero (hace años estaba en torno a los 1.500€. ahora no se sabe, porque «como no se tocan según qué temas…) desde luego, es el peor de los sistemas posibles.