EFE / El presidente de la Audiencia Provincial de Baleares, Diego Gómez-Reino, ha presentado hoy las primeras «salas amigables» de Palma, unos espacios habilitados para los menores de edad que tengan que pasar por las dependencias judiciales.
Estas salas, que cuentan con mobiliario adaptado, materiales lúdicos y un sistema de videoconferencia, tienen como objetivo que los menores que tienen que testificar puedan hacerlo en un entorno «agradable» y «lo menos estresante posible».
Gómez-Riero ha señalado en una rueda de prensa que todas las dependencias judiciales de Palma tienen «salas amigables» y ha indicado que estas infraestructuras van destinadas a menores que hayan sido víctimas de violencia o de agresiones sexuales.
Por su parte, el director de la Oficina de Defensa de los Derechos del Menor, Serafín Carballo, ha explicado que estas salas se pondrán a disposición de menores víctimas para evitar las esperas en los pasillos de las dependencias judiciales.
Carballo también ha explicado que las dependencias judiciales de las islas prevén que estas «salas amigables» también se creen en Manacor, Inca, Menorca e Ibiza a partir del próximo trimestre.
La «sala amigable» que se ha habilitado en la Audiencia Provincial de Baleares, a la que los menores podrán acceder acompañados de sus tutores legales, es un espacio con las paredes pintadas de colores claros y equipada con alfombras y sillones.
Este espacio cuenta con una pantalla por la cual la víctima puede comunicarse de manera telemática con el tribunal, lo que permite que el menor pueda ser entrevistado «sin todo lo imponente» que conlleva estar en la misma sala que el presunto agresor.
El presidente de la Audiencia Provincial ha remarcado que esta iniciativa persigue que la exploración de las víctimas pueda realizarse en un entorno amigable, lo que permitirá una menor victimización del presunto agredido.
En las «salas amigables», que solo se abrirán a petición de los representantes de las víctimas que lo soliciten expresamente, los menores pueden estar acompañados de sus padres, tutores legales, educadores o terapeutas.
Gómez-Reino también ha apuntado que otro de los propósitos del sector judicial balear es que se habiliten salas de espera para las víctimas que deban pasar por las dependencias judiciales para testificar.