@D.V./ El tiempo ha acompañado y ha regalado un día perfecto para que Santa Eulària des Riu luzca todo su esplendor en un domingo de mayo que ha salido redondo. El centro del pueblo, el paseo de s’Alamera y la remodelada plaza de España, han registrado un ambiente magnífico, atestado por vecinos, turistas y visitantes llegados de todos los rincones de la isla.
Hermandad ibicenco-mallorquina
La misa solemne se ha iniciado a las once de la mañana en Puig de Missa y la ceremonia ha sido presidida por el obispo Vicente Segura. Durante el oficio religioso ha cantado el coro de Campanet (Mallorca) acompañado del nuevo órgano de la iglesia, obra del maestro mallorquín Pere Reynés. Sin duda, se ha tratado de un momento de hermandad entre islas, coincidiendo con el aniversario del salvamento del vapor por parte de los vecinos de Santa Eulària.
El acto ha contado con la asistencia del alcalde de Santa Eulària, Vicent Mari, el Consell de Eivissa ha sido representado por los vicepresidentes Mariano Juan y Antoni Marí, y también ha asistido el nuevo conseller de Hacienda, el ibicenco Vicente Marí Bosó. El alcalde ha destacado que la jornada estaba siendo “maravillosa” y ha invitado a todos los vecinos a disfrutar de su pueblo.
Un pueblo en ebullición
Posteriormente, a la salida de misa se ha realizado un ball pagés ha cargo del Grupo Es Broll -que, como es habitual, ha sido fotografiado sin descanso por decenas de turistas- y se ha celebrado el tradicional desfile de carros y caballos que han atravesado el centro de la localidad. La calle principal, la plaza del Ayuntamiento y el paseo han registrado un lleno absoluto de vecinos.
En s’Alamera, además, también se ha instalado una exposición de vehículos y de maquinaria agrícola, un mercadillo de artesanía y algunos stands de comida y bebida. Los restaurantes de Santa Eulària, además, también han ofrecido una menú especial para celebrar el Día de la Madre, lo que ha sido una excusa más para alargar el día y disfrutar como se merece el anar a maig de este año.