@Noudiari / El Partido Popular de Sant Joan de Labritja presentó ayer por la noche su candidatura en un acto que tuvo lugar en Portinatx y en el que su cabeza de lista, el alcalde Antoni Marí ‘Carraca’, ofreció a los vecinos “la única lista formada al 100% por personas de este municipio, con más de la mitad de caras nuevas respecto a los anteriores comicios y una media de edad por debajo de los 40 años”.
‘Carraca’ ha apelado a sus convecinos “para que no se dejen llevar por marcas, que pueden resultar muy tentadoras por sus discursos nacionales, pero que al final no han presentado en este municipio una alternativa de gente de aquí, conocida por todos, que muestre el respeto y la dedicación que solo el Partido Popular puede garantizar en el municipio de Sant Joan”.
Además, el candidato popular ha pedido el voto a todo el municipio “porque somos la única alternativa a quien le avala su experiencia en la gestión municipal y quien ha demostrado conocer al detalle cada punto de nuestro municipio”.
Recuperar el Consell de Eivissa
Durante la presentación de su candidatura, Toni Marí ‘Carraca’ ha pedido expresamente el voto para Vicent Marí al frente del Consell Insular de Eivissa, recordando “la importancia de tener un Consell que muestre su apoyo a los municipio más pequeños, en vez de tener un órgano fiscalizador, que solo se ha dedicado en estos últimos cuatro años a poner palos en las ruedas” y se ha comprometido a que “si el Partido Popular logra la victoria en el Ayuntamiento de Sant Joan de Labritja, en el Consell Insular y en el Govern, prometo luchar para que las tres instituciones estén a la altura de las exigencias de mis vecinos”.
Por su parte el candidato a presidir la institución insular, Vicent Marí, se ha comprometido a colaborar con el Ayuntamiento de Sant Joan de Labritja en todos aquellos proyectos que, aunque dependen del Consistorio, necesitan el apoyo de otras administraciones, como el mantenimiento de las carreteras insulares, la mejora de la depuradora de Portinatx, la construcción de nuevos centros educativos o, incluso, la desaparición de las ruinas del Caló d’en Serra.