@Noudiari/ La policía francesa ha arrestado a un hombre franco-suizo de 56 años que llevaba en su equipaje tres kilogramos de cocaína líquida. Según informa la edición suiza del periódico 20 Minutos, el detenido, residente en Eivissa, acababa de aterrizar en Ginebra procedente de Perú, donde habría adquirido esta droga por 9.000 dólares. Su intención era viajar a la isla y comercializar aquí la sustancia, donde alcanzaría un valor de entre 200.000 euros y 500.000 euros.
Sobre residente en Eivissa, que fue detenido el pasado lunes, pendía una orden de registro emitida por un magistrado francés. Su intención era viajar a Niza desde la capital suiza y desde allí enlazar con otro vuelo a Eivissa, donde vendería la droga.
La cocaína líquida, que tiene la textura densa de un sirope, viajaba camuflada en diversas botellas de té helado de una marca sudamericana. En los últimos tiempos las organizaciones que se dedican al narcotráfico han optado cada vez más por transportar la cocaína en este formato, ya que resulta más difícil de detectar y pasa desapercibida en los escáneres de los aeropuertos. Se suele pasar de un país a otro en formato líquido, como ha sido el caso de este detenido, pero también impregnada en algunos materiales textiles, para dificultar su detención. La droga se licúa en el país de origen y se reconvierte en polvo en el lugar donde se va a comercializar.