@Noudiari / Una mujer británica de 32 años aterrizó en Ibiza el pasado lunes en estado de embriaguez portando solo su tarjeta de crédito y el pasaporte, nada más, ni equipaje ni memoria sobre cómo había llegado a la isla. Solo recordaba que había pasado el domingo de bautizo y después en un cumpleaños para despertar con resaca en el aeropuerto pitiuso.
Rachael Wynn reconoció a los medios británicos que esta había sido la mayor estupidez de su vida y la broma le había costado más de 700 euros.
Al parecer, la inglesa habló por teléfono con amigos que se encontraban en Ibiza y, en plena euforia etílica, decidió coger un vuelo a la isla.
Reconoce que el trayecto entre Manchester e Ibiza es algo que a penas recuerda.
La joven ya ha regresado a su casa y tendrá que explicarle a su jefe la ausencia del lunes al trabajo.
‘I got on a flight to Ibiza with nothing but passport and bank card after all-day bender’ https://t.co/5pRjV7Qc8W
— The Sun (@TheSun) August 21, 2019