@Noudiari / Las asociaciones Kellys de Ibiza y Formentera, Emprendada Feminista, Dones CGT de Eivissa y Formentera y Figa de Pic han firmado un manifiesto conjunto en el que explican por qué la lucha de las camareras de piso es la lucha de todas. Estas asociaciones feministas han decidido sumarse a la manifestación en apoyo a las kellys este domingo 25 de agosto, a las 19:30 en el Parque de la Pau.
«El sistema económico actual es androcéntrico y machista. Pensado por y para los hombres, y bajo una estructura de poder jerarquizada, tiene como objetivo una producción salvaje que pasa por encima de las necesidades reales de la población» introducen en su comunicado. Es en este contexto y aquí, en Ibiza, «donde la turistificación excesiva lleva a la isla a límites insufribles, donde las camareras de pisos y limpiadoras en general, los toca sufrir las peores desigualdades que este sistema provoca», añaden.
Estas asociaciones se preguntan qué es lo que reciben a cambio las kellys después de haber hecho 25 habitaciones de media sin poder ir al lavabo y con solo 15 minutos para comer. «¿Un sueldo digno? ¿Un buen trato? Nada de esto y peor aún. Lumbalgias, cervicalgia, estrés, depresión, ansiedad, tendinitis, artritis, insomnio… y todo crónico».
El INSHT (Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo) en sus NTP (Notas Técnicas de Prevención) manifiestan que no se está cumpliendo con la normativa «y esto es fácil de comprobar ya que los resultados reales no corresponden a los resultados esperados si realmente el Plan de Prevención de Riesgos Laborales se estuviera aplicando», explican desde las asociaciones. El 96% de las kellys están sufriendo problemáticas psicosociales y un 85%, problemas físico-ergonómicos, aseguran.
Es por eso que las kellys piden, entre otras cosas, la regulación de la carga de trabajo, adoptar mejoras ergonómicas, la medición del tiempo de la jornada, el reconocimiento de las dolencias derivadas del trabajo, la jubilación anticipada por tratarse de una profesión de riesgo, etc. «Pero la respuesta por parte de la patronal está siendo reiteradamente un ‘no’ a ampliar la plantilla y uno ‘no’ a mejorar las herramientas y puestos de trabajo. O sea no invertir en quien está haciendo crecer la empresa para aumentar una plusvalía (astronómica) que solo disfrutarán ellos», exponen indignadas.
Señalan que por ley, es obligación del empresario combatir y evitar los riesgos laborales y adaptar el trabajo a las personas para evitar su efecto negativo en la salud. Por eso, «no se puede permitir que lo que se ahorra el empresario lo paguen las trabajadoras con su salud y los contribuyentes a la Seguridad Social».
«Por todo estos y porque sabemos que la realidad de las kellys se ve agravada con el trabajo doméstico impuesto por el patriarcado una vez llegan a casa, no nos atrevemos a decir que lo que están sufriendo las kellys no tienen nombre. Porque sí lo tiene. Se denomina machismo, capitalismo y patriarcado», insisten estas asociaciones feministas.
Así pues, los colectivos feministas de Ibiza y Formentera en una de muestra de solidaridad y ante el silencio de los sindicatos mayoritarios y Govern balear, se unen para recordar a las kellys que no están solas y se alzan en la defensa de sus derechos, a la vez que las animan a secundar la huelga.
«Porque todas queremos trabajar para acabar con la deshumanización que el capitalismo patriarcal provoca y llegar a un modelo más horizontal, construido atendiendo la perspectiva de las mujeres, y que ponga en el centro el mantenimiento de la vida, y no el enriquecimiento individual. Un modelo igualitario y correspondido sin rendijas salariales ni techos de cristal. Sin segregaciones laborales por razón de sexo, que tenga en cuenta las capacidades, preferencias y ritmos de cada uno y apodere realmente las mujeres y los colectivos marginados. Donde se revaloricen las tareas reproductivas. Un modelo más sostenible y respetuoso con nuestra naturaleza cíclica y no tan agresivo para las trabajadoras y el medio. Un modelo que garantice una vida digna para todas y todos sin maltratos ni menosprecios. Las kellys no son ni histéricas ni ignorantes, son buenas profesionales que pararán para acabar con la suciedad de la isla. Y allá estaremos para, entre todas, mantener vivo el espíritu del 8M», finalizan.