Reproducción integra del texto remitido y firmado por las 16 personas arrestadas el pasado 25 de agosto durante una fiesta ilegal celebrada en una zona protegida junto a Platges del Comte (Sant Josep) y que se encuentran en libertad con cargos:
El día 26 de agosto aparecía en la prensa pitiusa un artículo ilustrado con la fotografía de las autoridades encargadas de desmantelar una fiesta rave ilegal. Los protagonistas de la fotografía -el alcalde de Sant Josep, el Director Insular, y los responsables de la policía local de Sant Josep y de la Guardia Civil-, se felicitaban de la impecable coordinación de las fuerzas intervinientes, lamentando que diez guardias civiles y un policía local hubiesen sufrido lesiones leves, salvo uno de los primeros, que tendría rotos dos dedos de la mano (posible rotura del dedo meñique de la mano derecha, dice el atestado), añadiendo que uno de los policía locales incluso tuvo que disparar al aire al verse rodeado de tanto energúmeno blandiendo palos, barras de hierro y tirando piedras.
«La colaboración vivida este fin de semana es para estar orgullosos de la isla en que vivimos», concluyeron.
Llama la atención que ningún medio se interesara por saber la versión de quienes participaron en la tan citada fiesta ilegal, porque normalmente las historias se contrastan ya que pocas veces coinciden.
Pues bien, el día 23 comenzaron a llegar a Torre d’en Rovira, entre Cala Comte y Cala Bassa, varias caravanas con jóvenes, para preparar el terreno de la fiesta rave. Limpiaron la zona, que estaba llena de basura e instalaron el equipo de música. Muchos de los allí congregados eran italianos, pero también había gran cantidad de españoles, y algún turista.
Sin lugar a dudas el sitio elegido es un espacio protegido, y nunca debió haberse acampado allí, eso es indiscutible
La convocatoria no reunió más de 200 personas; nunca mil.
El sábado 24 de agosto, a la noche, aparecieron dos agentes policiales, informando que no se podía hacer ninguna fiesta y que debían desmontar los equipos de música. Se apagó la música.
Al día siguiente, domingo por la mañana, aparecieron ya más vehículos policiales. Los agentes, al escuchar música, sacaron sus porras y comenzaron a repartir golpes entre los asistentes. A la fuerza procedieron a llevarse la mesa de mezclas.
En ningún momento fueron rodeados ni tuvieron que disparar al aire por temor a ser agredidos. Sí dispararon al aire, no una sino dos veces, y apuntaron con sus pistolas a quienes les preguntaban por el porqué de tanta violencia, pidiéndoles que dialogaran.
Los agentes se fueron.
Ante el cariz que tomaban los acontecimientos, muchas caravanas abandonaron el lugar. Quedaron no más de cien personas, que comenzaron a recoger sus pertenencias y a limpiar de residuos la zona.
Era la tarde, cuando quienes aún permanecían en el paraje vieron aparecer gran cantidad de vehículos policiales cargados de agentes, que sin mediar palabra e insultando, comenzaron a golpear indiscriminadamente a las personas que allí se encontraban.
Desde luego, alguno de los congregados puede haber empuñado un palo, o puede haber tirado piedras… pero se convendrá en que el panorama no estaba como para recibir a los agentes con confetti o pétalos de flores.
Se produjo una desbandada general. La gente corría, perseguida por iracundos agentes que repartían porrazos a diestra y siniestra. A dos jóvenes mujeres les rompieron los brazos mientras huían despavoridas. Les decían «perras» y otras lindezas. Una es española y la otra italiana. Afortunadamente pudieron tomar el número de placa de sus agresores, que advertidos, se las quitaron de inmediato. Formularon denuncia. Parece que es más fácil golpear con saña a mujeres indefensas, que a hombres. La joven italiana, con el brazo roto tuvo que esperar 16 horas en el cuartel de la Guardia Civil, hasta que fue dejada en libertad sin haber recibido atención médica, debiendo llamar ella a una ambulancia para que la llevara al Hospital.
Pero los agentes no sólo se dedicaron a golpear a gente desarmada. También rompieron los cristales de algunas caravanas.
Los perros de los asistentes fueron llevados a la perrera municipal. Uno de los canes, de 13 años y enfermo, no resistió, y murió.
Se detuvo a unas setenta personas: la mayoría quedó en libertad con cargos. Quince, pasaron a disposición judicial; la joven española con el brazo roto no pudo ser interrogada: estaba ingresada en el Hospital. Casi todos los detenidos presentaban lesiones, por lo que fueron explorados por el médico forense.
De todo lo dicho existen vídeos, que serán presentados en el proceso penal, como prueba de que lo que aquí se expone, es cierto.
Seguirán entonces las autoridades, estando orgullosas de la isla en la que viven?
Esta es la mejor parte: «pero se convendrá en que el panorama no estaba como para recibir a los agentes con confetti o pétalos de flores.» Admiten que se les avisó dos veces y ahí seguían dándole, y al darles el tercer aviso, no estaba la cosa para recibirles con confetis. Efectivamente, porque AL PRIMER AVISO no deberían estar ahí ya, parásitos.
Espero que envien tambien los videos a «Tele5». Para poder verlos…..
No ho entenc. A la nit diu què apaguen la música quan s’ho demanen, però què al matí, la policia carrega contra ells quan escolten la música. Però no l’havien apagat? S’enriuen de la policia i encara volen tenir la raó? S’enriuen de tots els eivissencs i demanen poder seguir enriguent-se de naltros?
Estos señores deben tener la percepción alterada por algún tipo de sustancia que tomaron en la «RAVE» o tal vez estuvieron en una fiesta o «dimensión» diferente…
…vídeos retocados, manifestaciones que no se sustentan, mentiras a la cara…, no hace falta haber estado allí para saber que estos señores y señoras mienten como bellacos…
…ya está bien de pretender tomarnos el pelo…
…todo tiene un límite. Buenos si, pero tontos no.
Sres.de la Rave,que parte no entienden todavía ustedes :”DE QUE USTEDES NO TENÍAN QUE ESTAR ALLÍ..”.Si tanto les preocupa de verdad el medio ambiente,no lo pisoteen y cuídenlo. Pónganse ustedes a recoger basura con una bolsa en mano,como hacen muchos voluntarios y dejen de organizar cosas así en espacios protegidos o fincas de propiedad Privada. La naturaleza quiere el ruido ambiente natural y no sobrecargas de decibelios en trailer. Para ser respetado,hay que respetar primero.
PARÁSITOS!!!
No jodamos, Tina.
En los comentarios de este diario digital se tiene la ventaja de la pluralidad, cosa que en el de los deditos no…
En el de los deditos borran los comentarios que no son de su agrado,si no van en la dirección que ellos desean…
Dicho esto, me dispongo a exponer muy brevemente mi opinión.
Nadie discute el echo de estar en un terreno protegido, nadie discute de la peligrosidad de incendio o contaminación acústica… Lo que se discute, fue actuación de las fuerzas de seguridad, que fue desproporcionada os gusté o no.
Fue desproporcionada tanto en número,como en las formas y premeditación en llevarse por delante a quien fuese y eso no se debería de permitir, os guste o no os guste,el tipo de individuos que estaban involucrados en la rave. La mayoría de comentarios son de odió,en muchos casos extremo.
Si está intolerancia la dirigieran en las verdaderas cosas importantes,otra isla tendríamos.
Sois unos hipócritas.
Hipocritas? Hipocritas estos personajes que van por la vida de megaguais, y no son mas que parasitos que viven de la mamandurria. ¿Que hacian en ese lugar poniendo musica a todo volumen? ¿Que hacian en un lugar que como ellos mismos reconocen no deberian de haber estado? Al final es lo de siempre, la policia son los malos de la pelicula, y estos personajes, son los heroes. Venga ya.
¿Qué hacían en Ibiza poniendo música a tope? Lo que se hace en toda Ibiza, pero si se les paga pues ya vale todo no?
Venga tots a pasturar