@Noudiari / El acto de conciliación en el Tribunal de Arbitraje y Mediación de las Islas Baleares (TAMIB) ha finalizado sin acuerdo entre los miembros del comité de empresa de los Informativos de IB3 y las partes denunciadas, esto es, el canal autonómico y la empresa Liquid Media.
Los nueve miembros del Comité y una trabajadora habían presentado conjuntamente en enero un intento de conciliación, previo a posibles demandas, en el que reclamaban que se les internalizase como trabajadores del Ente Público de Radiotelevisión de las Islas Baleares, ya que la mayor parte de la plantilla está subcontratada y cobra un salario muy bajo.
Al acto de conciliación han asistido el director general de IB3, Andreu Manresa; la gerente de IB3, Margarita Cardona, y una representante legal de Liquid Media SL, del grupo Mediapro.
«Después de este intento de conciliación, nuestros abogados han iniciado los trámites para la presentación de demandas individuales por cesión ilegal de trabajadores contra IB3 y Liquid Media SL ante un juzgado competente de Palma», explican en un comunicado.
Decenas de demandas
El objetivo de estas demandas es conseguir la internalización de todo el personal de la contrata de Liquid Media en el Ente Público de Radiotelevisión de las Islas Baleares.
Es más, explican que decenas de compañeros subcontratados ya han iniciado los trámites para presentar demandas en el mismo sentido.
«El Comité ha tomado esta decisión porque considera que es la única vía que nos queda para acabar con un sistema de externalización que perjudica todos los trabajadores subcontratados», subrayan.
«Queremos que la justicia dictamine sobre la legalidad del actual sistema y si tenemos derecho a ser trabajadores de IB3 en igualdad de condiciones con el personal propio del ente público», añaden.
Esta acción legal la toman no a la ligera sino después de años de reclamaciones ante IB3, ante el Govern balear y los partidos políticos para conseguir «la necesaria internalización».
Esa es la mejor vía para garantizar «una mejora real de nuestras condiciones laborales después de 15 años de degradación», al mismo tiempo que se da estabilidad a los puestos de trabajos de la televisión pública balear.