EFE / Un total de 20 agricultores han fallecido en Baleares en la última década debido a accidentes laborales relacionados con el uso de alguna máquina agrícola, según un trabajo elaborado conjuntamente por la Universidad Pública de Navarra y la de Zaragoza.
Al menos 1.172 personas fallecieron en la última década en España en accidentes laborales ocurridos en el campo, 1.004 de ellos mientras utilizaban algún tipo de maquinaria agrícola, de los cuales más de la mitad se produjeron por el vuelco de un tractor, según el informe «Siniestralidad mortal agrícola, vuelco de tractores y riesgos de incendios en cosechadoras (2010-2019)».
El trabajo, auspiciado por la Fundación Mapfre, ha sido presentado este miércoles en la Feria Internacional de Maquinaria Agrícola (FIMA) que se celebra en Zaragoza.
Se ha utilizado como fuente las noticias publicadas en los medios de comunicación locales sobre los siniestros que se han registrado en el sector entre los años 2010 y 2019.
De acuerdo a los datos publicados, los fallecidos estaban utilizando algún tipo de maquinaria agrícola en un total de 1.004 de los accidentes mortales, lo que representa un 85,7 % de los casos.
El informe especifica que, en concreto, 880 de los accidentes mortales se produjeron cuando el fallecido estaba conduciendo un tractor, de los cuales 595 fueron como resultado del vuelco del vehículo. Es decir, el 51 % del total de accidentes mortales en el campo.
En ese sentido, el documento revela también que en el 91 % de los vuelcos con final mortal el tractor no disponía de la estructura de protección en caso de accidente o la llevaba abatida.
En cuanto al perfil de los fallecidos, el estudio indica que el 54 % de las personas eran mayores de 60 años y en su inmensa mayoría varones.
Sin embargo, también destaca que en la última década un total de 19 menores de 16 años han fallecido en accidentes laborales en el campo, principalmente por el uso de tractores.
Por comunidades autónomas, Galicia es la región que ha registrado más accidentes mortales relacionados con el uso de maquinaria agrícola en la última década, con un total de 184 siniestros, seguida de Andalucía (124) y Castilla y León (107).
Por el contrario, Islas Canarias es la región que menos siniestros de carácter mortal ha contabilizado con un total de 11, acompañada de la Comunidad de Madrid (12) y Cantabria (14).
El propio informe señala que hay que ser “cautos” a la hora de interpretar los datos regionales, ya que están condicionados por la sensibilidad de la prensa local con los accidentes agrícolas o la existencia de un mayor parque de vehículos en cada región.
Todos estos datos contrastan con los reportes de los sucesivos ministerios de Trabajo que han registrado 473 víctimas mortales en accidentes laborales en el campo entre 2010 y 2019, apenas un 40 % del volumen detectado en el estudio.
Los autores del informe han explicado que esta diferencia se debe fundamentalmente a que la mayor parte de los fallecidos eran trabajadores por cuenta propia, familiares que ayudaban en las tareas del campo o jubilados, por lo que no figuran en los registros laborales oficiales.