@Noudiari / La plataforma de alojamiento Airbnb prometió en marzo realizar reembolsos totales y en efectivo a los viajeros cuyos planes se han visto afectados por el Covid-19, sin embargo muchos clientes se quejan por no haber logrado recuperar su dinero, además, se penaliza a los anfitriones que cancelan las reservar que tienen para el verano. En Ibiza también hay viajeros y anfitriones afectados por sus políticas de cancelación confusas.
Es el caso del ibicenco Juan Blanco, huésped habitual de Airbnb, que tenía un viaje programado para el 28 de abril a Nueva York. A fecha de hoy, ha logrado solución por la cancelación de los vuelos con Iberia, sin embargo, no obtiene respuesta ni solución de la plataforma de alojamiento. Juan ha explicado a NouDiari que lleva 10 días intentando recuperar los 400 euros que pagó del coste íntegro del alojamiento y que al principio le pidieron documentación oficial para justificar la cancelación de su viaje. «Pero ahora ya ni responden al teléfono, ni hay manera de contactar con ellos».
El modelo de negocio de Airbnb se basa en los pagos anticipados, lo que ha llevado a la empresa a una situación complicada. Las políticas de reembolso para los huéspedes explican que no perderán su dinero por el alojamiento en viajes no realizados.
Airbnb explica en su política de cancelación por Covid-19 que: “Las reservas para estadías y experiencias de Airbnb realizadas el 14 de marzo de 2020 o antes, con una fecha de registro entre el 14 de marzo de 2020 y el 31 de mayo de 2020, pueden cancelarse antes del check-in. Esto significa que los huéspedes que cancelen recibirán, a su elección, crédito de viaje o un reembolso completo en efectivo”.
A pesar de ello, Airbnb les dice a algunos invitados que solo ofrecerá reembolsos en efectivo si pueden demostrar, con documentación, que caben en uno de las cuatro categorías que han establecido: Restricciones gubernamentales que les prohíben abandonar su ubicación o ir a su destino. Están enfermos y su proveedor de salud les ha indicado que no viajen. Sus medios de transporte ya no están disponibles. Son profesionales de la salud y no pueden viajar.
Penalizaciones para los anfitriones que cancelen las reservas de verano
La compañía americana está cobrando a los anfitriones multas de 45 euros por cancelar las reservas programadas a partir de junio. También se les puede cobrar esa penalización por cancelar reservas de abril o mayo si dichas reservas se realizaron después del 14 de marzo, según recogen en Business Insiders, medio digital estadounidense de noticias financieras y empresariales.
Algunos anfitriones de Airbnb han mostrado su malestar con la presión y amenazas de penalizaciones tras decidir que no permitirán la entrada de huéspedes a sus hogares hasta que finalice el verano por temor al coronavirus.
La plataforma se está mostrando contradictoria en sus políticas anunciadas y acciones realizadas, pero pide paciencia a los anfitriones, dicen que sus políticas de cancelación están evolucionando y les recomienda esperar a junio a ver si aún siguen las restricciones por la pandemia.