NouDiari / La Guardia Civil arrestó en la madrugada de ayer a un hombre en Sant Antoni de Portmany por resistencia y desobediencia. El ciudadano cayó al mar cuando intentaba entrar al puerto deportivo sin autorización. Los agentes lo rescataron. El ciudadano, una persona conflictiva y conocida en la zona, ya había tratado de acceder al puerto en varias ocasiones y había hecho caso omiso a las indicaciones de los guardias.
En Eivissa, la Policía Nacional detuvo a otras cinco personas por vulnerar el confinamiento domiciliario. Una de ellas, una mujer de 38 años, fue sorprendida ayer tarde deambulando por la calle sin motivo justificado. Le constaban cinco denuncias anteriores por desobediencia y una detención del pasado 5 de abril.
Horas antes, también por la tarde, otra mujer de 31 años fue arrestada cuando golpeaba las puertas de un edificio y gritaba en la vía pública. Había sido propuesta para sanción tres veces. Al mediodía, la Policía Nacional interceptó a un hombre de 34 años que caminaba por la calle sin causa justificada y al que se le habían levantado tres actas administrativas por desobediencia.
Por la mañana, otro ciudadano de 39 años trató de escapar corriendo de los agentes, pero fue alcanzado. Había sido denunciado en cuatro ocasiones y también detenido el 4 y el 14 de abril. Por último, una mujer de 41 años fue arrestada la pasada madrugada en Eivissa por permanecer en la calle sin motivo y haber sido propuesta para sanción cuatro veces.
Mallorca
En Mallorca, la Guardia Civil de la localidad de Inca detuvo a un hombre que se hacía pasar por sargento del Ejército de Tierra. El ciudadano se paseaba por el municipio de Consell vestido con el uniforme y realizaba funciones policiales durante el estado de alarma como comprobar los motivos de los desplazamientos de la gente. Llegó a instar a alguna persona a que regresara a su domicilio. Fue arrestado por usurpación de funciones públicas.
En Palma, la Policía Local detuvo ayer a otros dos hombres de 32 y 29 años por incumplir las restricciones. El más joven fue sorprendido bebiendo alcohol en la calle General Riera. Le constaban tres denuncias anteriores.
Por su parte, la Policía Nacional arrestó a otras cinco personas en la ciudad. Una de ellas, una mujer de 32 años, que se enfrentó a los agentes cuando estos le pidieron que se separara de su pareja, ya que ambos iban caminando juntos por la zona de Pere Garau. El hombre lo aceptó y colaboró, pero ella desobedeció y se negó a identificarse. Otro ciudadano de 36 años fue sorprendido cuando circulaba en bicicleta por el Coll d’en Rabassa. Reconoció que había salido a dar a una vuelta. Había sido propuesto para sanción dos veces.
Los agentes arrestaron ayer tarde a un hombre de 34 años cuando caminaba por Son Banya sin causa justificada. Le constaban tres actas administrativas por desobediencia. Un joven de 19 años también fue detenido ayer tarde en el barrio de La Soledat tras admitir que había salido a la calle para ir a casa de un amigo. Los agentes comprobaron que había sido denunciado por desobediencia otras dos veces.
Por último, la Policía Nacional arrestó la pasada madrugada a un joven de 24 años tras ser sorprendido con otros dos en la calle Manacor. Había sido propuesto para sanción en tres ocasiones y fue detenido por los mismos hechos el día anterior. Los otros dos jóvenes que le acompañaban fueron denunciados por desobediencia.
Aeropuertos
Por otro lado, el aeropuerto de Son Sant Joan, en Palma, registró ayer la llegada de 173 pasajeros, mientras que otros 157 abandonaron Mallorca en los 10 vuelos que operaron, según los datos de la Guardia Civil. El aeródromo de Eivissa recibió 42 viajeros en dos vuelos de entrada y otros 34 se marcharon de la isla en dos vuelos de salida. El aeropuerto de Menorca contabilizó a 24 personas que llegaron y otras 12 salieron de la isla en cuatro vuelos programados.
La jornada de hoy se está desarrollando sin incidencias relevantes en el archipiélago. La Delegación del Gobierno en Illes Balears agradece la colaboración de la ciudadanía durante estos días, pero advierte de que no podemos relajarnos en la lucha contra el coronavirus. Insiste en que el confinamiento es nuestra máxima protección frente a la pandemia, además de seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias.