EFE / La presidenta del Consell de Formentera, Alejandra Ferrer, ha valorado este martes el hecho de que la isla anticipe su desescalada al 4 de mayo, aunque «se debe tratar con mucha responsabilidad», ha apuntado.
Ferrer ha indicado que para llevar a cabo este desconfinamiento, sin someterse a la fase 0, se deberán establecer todas las «medidas y controles» necesarios con el fin de «garantizar» la seguridad de los ciudadanos.
En este sentido, ha avanzado que, aunque el adelanto de esta desescalada es un primer paso «muy importante» y una «buena noticia» se requerirá de la «misma responsabilidad y cumplimiento» que han tenido hasta ahora los residentes en la isla.
La presidenta de la máxima institución insular ha dicho que en los próximos días se estudiarán de «manera detallada» cada una de las fases para tomar las decisiones correspondientes y solicitará, en la próxima reunión de presidentes, la «colaboración y coordinación» con el fin de que el confinamiento se haga con «toda seguridad» y no suponga «un paso atrás».
La presidenta insular ha recordado que la isla registra 6 casos acumulados positivos en coronavirus, 3 de ellos activos, y un fallecido.
Para Ferrer, estos resultados de contagiados son muestra de la «colaboración colectiva» de los ciudadanos y de las medidas «estrictas» aplicadas desde las instituciones.
Ferrer ha recordado que la fase 1 implica la apertura de algunas actividades y más movimiento para las personas. Asimismo, también contempla la apertura de hoteles y alojamientos turísticos excluyendo zonas comunes y, según ha dicho Ferrer, de manera «interna» ya que no podrán llegar «turistas hasta fases posteriores».