EFE / La Consellería de Salud y Consumo pone en marcha, a partir de este lunes, la realización de pruebas de diagnóstico de la COVID-19 a todos los casos sospechosos y un estudio de contactos .
Estas pruebas forman parte de la estrategia de diagnóstico, vigilancia y control de la fase de transición de la pandemia, ha indicado la Consellería este domingo.
A todos los pacientes sospechosos de estar afectados por la COVID-19 se les hará la prueba de diagnóstico —PCR— en un plazo inferior a 24 horas. En el caso de resultar positiva se iniciará un estudio de los contactos estrechos, con el objetivo de poder hacer un diagnóstico precoz de la enfermedad.
El documento considera caso sospechoso de infección por SARS-CoV-2 cualquier persona con un cuadro clínico de infección respiratoria aguda de aparición repentina de cualquier gravedad que cursa, entre otros, con fiebre, tos o sensación de falta de aire. Otros síntomas atípicos, como dolores musculares, diarreas, dolor torácico o cefaleas, entre otros, pueden ser considerados también como síntomas sospechosos de infección por SARS-CoV-2, según criterio clínico.
El objetivo de la estrategia consiste en aumentar la capacidad de detección precoz, en aislar nuevos casos —sospechosos y confirmados—, así como también en hacer la vigilancia y el diagnóstico de los contactos estrechos, que son el eje central para poder acometer la fase de transición con las máximas garantías.
Las pruebas de diagnóstico de la COVID-19 se harán en Mallorca directamente en el centro de salud del paciente sospechoso de tener la enfermedad. Los centros de salud contarán con PCR.
Una vez tomadas, las muestras se enviarán al laboratorio del Hospital Universitario Son Espases. En Menorca y en Ibiza y Formentera, las harán las unidades volantes de atención al coronavirus (UVAC) y los centros de COVID-exprés. En el caso de Menorca las muestras se remitirán al laboratorio del Hospital Mateu Orfila y en el caso de Ibiza y Formentera al Hospital Universitario de Son Espases.
El estudio de contactos estrechos de los casos positivos de las cuatro islas estará centralizado en Mallorca y se llevará a cabo por personal de enfermería de atención primaria. Cualquier persona asintomática que cumpla la definición de contacto estrecho de un caso confirmado tendrá que ser informada y se le hará una vigilancia. En el caso de los convivientes se les hará el seguimiento desde el momento de la detección del caso sospechoso.
Este seguimiento de los posibles contactos estrechos será determinante para poder hacer una detección precoz de la enfermedad durante esta fase de transición.