NouDiari / La Asociación de Centros Infantiles de Ibiza y Formentera ha iniciado una petición de firmas en changer.org dirigida al Gobierno de España, al Ministerios de Educación, al Govern Balear y al Consell d’Eivissa. En su exposición, reclaman «detalle de los protocolos sanitarios a implantar, acordes a las necesidades del sector infantil de 0 a 3 años. Aclaraciones de por qué algunos centros de titularidad pública abren y otros no. Así como la necesidad de crear una línea de ayuda pública para los centros infantiles privados, dado que con la situación actual y las restricciones sanitarias impuestas, ningún centro podrá aguantar durante mucho tiempo esta situación, y llevará al futuro cierre de muchos centros infantiles».
En la petición, que ha alcanzado casi 500 firmas en 3 horas desde su lanzamiento este martes, la Asociación de Centros Infantiles pitiusos de PIMEEF manifiesta su «preocupación» por las medidas que debe adoptar el sector para «ofrecer mayor seguridad a los niños, a las familias y a los trabajadores».
Desde la Asociación explican que entienden la necesidad de que se reinicien sus servicios para que las familias puedan conciliar con la vida laboral, por lo que afirman que «estamos trabajando para poder empezar la actividad lo antes posible». No obstante, matizan, «existe una preocupación aún mayor, como es que las medidas aplicadas son totalmente insostenibles para las empresas del sector, que se encuentran frente a una grave situación económica y social desde el cierre de los centros y que se verá agravada ante sus hipotéticas reaperturas».
Las decisiones del Govern Balear de no abrir los centros de los que son titulares, pero sí dejar al criterio de las guarderías privadas la posibilidad de abrir con las restricciones que la máxima institución balear impone, «tanto en número de niños que podrán acoger los centros, como las medidas higiénicas y sanitarias que tendrá que tomar cada centro»; ha provocado una «gran inseguridad en todos los centros infantiles privados de la isla».
Desde la Asociación creen que la forma en la que el Govern da opción a su sector de volver a abrir las puertas es «totalmente desacertada», dejando la responsabilidad a los propios centros que no son de su titularidad, «llevándonos a una situación totalmente insostenible y que, si no cambia, derivará en el cierre de muchos centros».
«Lamentándolo profundamente, ningún centro privado de la isla va a abrir sus puertas el 25 de mayo, incluso alguno las ha cerrado definitivamente. Es más, observamos con angustia cómo se puede agravar una crisis social debido a que ningún centro homologado ni no homologado abra puertas. Esto llevaría a un incremento exponencial de la economía sumergida en el sector, exponiendo a los niños a riesgos al dejarlos en viviendas particulares no acondicionadas y sin ningún control sanitario que, sin embargo, se nos exige a nosotros».