NouDiari / La revista Science ha confirmado la potente actividad de plitidepsina (Aplidin), del laboratorio español PharmaMar, frente al SARS-CoV-2.
Se trata de un antiviral fabricado con Aplidium albicans, un invertebrado que se encuentra en las aguas de Ibiza. Así, el medicamento se elabora con una especie que vive pegada a las rocas de la zona del Mediterráneo y que la farmacéutica descubrió hace décadas en los fondos marinos de s’Estany des Peix, en Formentera, y en Ibiza para usarla con otros fines.
Así lo ha anunciado hoy la propia PharmaMar, que destaca el rotundo contenido del artículo Plitidepsin has potent preclinical efficacy against SARS-CoV-2 by targeting the host protein eEF1A (Plitidepsina tiene una potente eficacia preclínica contra el SARS-CoV-2 al dirigirse a la proteína del huésped eEF1A) en la revista científica Science.
El artículo relata que la plitidepsina in vitro demostró «una fuerte potencia antiviral, en comparación con otros antivirales contra el SARS-CoV-2, y con una toxicidad limitada».
Esta noticia ha disparado la cotización de la farmacéutica en bolsa.
En dos modelos animales diferentes de infección por SARS-CoV-2, «el ensayo demostró la reducción de la replicación viral, lo que resultó en una disminución del 99% de las cargas virales en el pulmón de los animales tratados con plitidepsina«.
La revista @ScienceMagazine confirma la potente actividad del compuesto de PharmaMar, frente al SARS-CoV-2 #COVID19. El estudio demostró una fuerte potencia antiviral contra el SARS-CoV-2 con una toxicidad limitada.
— PharmaMar (@PhrmMar) January 26, 2021
La publicación concluye que la plitidepsina actúa bloqueando la proteína eEF1A, presente en las células humanas, y que es utilizada por el SARS-CoV-2 para reproducirse e infectar a otras células.
Este hecho podría ser crucial para frenar las nuevas cepas.
Así, Kris M. White, Ph.D., profesor adjunto del Departamento de Microbiología de la Escuela de Medicina Icahn del MonteSinaí que ha participado en el estudio, ha comentado: «Plitidepsina es un inhibidor extremadamente potente del SARS-CoV-2, cuya principal ventaja es que se dirige a una proteína de las células humanas y no a una proteína del virus. Esto significa que si plitidepsina tiene éxito en el tratamiento del COVID-19, el virus del SARS-CoV-2 no podrá hacerse resistente, mediante mutaciones, al tratamiento. Esto representa una gran preocupación con la actual propagación de las nuevas variantes del Reino Unido y Sudáfrica».
“Creemos que nuestros datos y los resultados positivos iniciales del ensayo clínico de PharmaMar sugieren que plitidepsina debería considerarse seriamente para ampliar los ensayos clínicos para el tratamiento de COVID-19″, afirma Pharmamar.
Actualmente, PharmaMar está negociando con diferentes organismos reguladores el inicio de los ensayos de fase III previstos (con humanos) y subraya que el tratamiento es 30 veces más efectivo que el del Remdesivir contra el Covid y que reduce un 99 por ciento su carga viral.
Ante la continua propagación mundial de COVID-19 y la creciente desesperación por encontrar un tratamiento, el director del Instituto de Biociencias Cuantitativas (QBI) de la Universidad de California en San Francisco, Nevan Krogan, Ph.D., unió fuerzas coninvestigadores de la UCSF, el Instituto Gladstone, la Escuela de Medicina Icahn del Monte Sinaí, el Instituto Pasteur y el Instituto Médico Howard Hughes para contribuir con sus conocimientos a la búsqueda de un tratamiento para la creciente pandemia.
Juntos, este grupo de investigadores conocido como QBI Coronavirus Research Group (QCRG), fueron los primeros en trazar un mapa exhaustivo del genoma de COVID-19 y descubrir que el virus interactúa con 332 proteínas de las células humanas.
Estos investigadores constituyen el nexo de unión entre los experimentos citados en el artículo.