NouDiari / La Dirección general de Emergencias coordinará un dispositivo conjunto y reforzado de los cuerpos y fuerzas de seguridad y los inspectores del Govern en las zonas de ocio y turísticas de todas las Baleares, desde este miércoles y durante toda la Semana Santa, para vigilar el cumplimiento de las medidas COVID-19 por parte de residentes y visitantes.
El foco principal de este dispositivo serán las zonas tradicionales de ocio, con terrazas y tardeo, en las diferentes islas, con especial atención a aquellas áreas donde los datos muestran una mayor frecuencia de incumplimientos.
También se reforzará la presencia en las zonas turísticas, con intervenciones en establecimientos hoteleros, así como en los locales de oferta complementaria de restauración y ocio de la zona. En los hoteles, se vigilarán las zonas comunes, como restaurantes, bares, terrazas o piscinas para asegurar que se cumplen estrictamente las medidas de seguridad.
A la vez, el dispositivo se verá reforzado con la vigilancia con drones desde el aire, sobre todo en áreas amplías como playas o espacios naturales, que son más complicadas de controlar por tierra. Cuando los drones de la Unidad Operativa de Emergencias detectan una aglomeraciones u otros incumplimientos, se avisa a la policía local afectada, Policía Nacional o Guardia Civil para que intervengan. Igualmente las playas urbanas serán objeto de vigilancia por parte del dispositivo, en el cual se integran los inspectores de Emergencias, Salud, Turismo y Agentes de Medio Ambiente del Govern, y también inspectores de los Consells Insulares.
Este dispositivo de mayor vigilancia se suma a las actuaciones proactivas que puedan llevar a cabo los diferentes cuerpos o fuerzas de seguridad por iniciativa propia o por peticiones recibidas de la ciudadanía, que en cualquier momento puede solicitar la intervención de la autoridad ante un incumplimiento.
«La coordinación está siendo muy buena y queremos agradecer a todos los operativos su implicación», ha destacado la consellera de Presidencia, Función Pública e Igualdad, Mercedes Garrido, co-directora del Plan de Protección Civil de las Islas Baleares (Platerbal) actualmente activado por lucha contra la COVID-19.
Garrido ha señalado que en toda Europa están subiendo los contagios y en Baleares “no nos lo podemos permitir. No nos podemos relajar. El cumplimiento de las medidas depende de cada uno de nosotros y de nuestro comportamiento en los próximos días» ha dicho, pidiendo máxima colaboración, sentido común y prudencia durante los días de fiesta.
Por su parte, la consellera de Salud, Patricia Gómez, también co-directora del Platerbal, ha destacado la importancia de seguir las normas y recomendaciones para evitar los contagios y ha dado las gracias a todas aquellas personas que las cumplen. Gómez ha recordado que el mayor riesgo proviene de los encuentros sociales y familiares, especialmente en ámbitos privados, donde hay la tendencia a relajarse.
Normas principales que regirán a espacios públicos y privados.
Gómez ha explicado que hasta el 11 de abril, en los espacios privados, tanto interiores como exteriores, las reuniones sociales tendrán que ser de un único núcleo de convivencia.
En este sentido, las habitaciones de los hoteles o las viviendas vacacionales también son considerados espacios privados y, por lo tanto, en su interior o exterior sólo se puede reunir un único núcleo de convivencia.
Aun así, se han establecido algunas excepciones en esta medida:
Se permite a las personas que viven a solas reunirse con otra unidad de convivencia, constituyendo así una unidad de convivencia ampliada. Cada unidad de convivencia puede integrar sólo a una única persona que viva a solas.
Igualmente, se autorizan las reuniones de personas menores de edad y de estudiantes mayores de edad con los progenitores, en caso de que vivan en domicilios diferentes, como podría ser el caso de separación o divorcio.
También se permiten las reuniones de personas con vínculo matrimonial o de pareja que viven en domicilios diferentes.
Finalmente, se permite el cuidado, la atención o acompañamiento a personas menores de edad, personas mayores o dependientes, con discapacidad o especialmente vulnerables, por motivos justificados.
En el caso de los espacios públicos, sí se permiten las reuniones con otro núcleo de convivencia. Se pueden juntar 6 personas como máximo de dos núcleos de convivencia en cualquier espacio público al aire libre. Si el encuentro se produce a la terraza de un bar o restaurando sólo pueden ser 4 personas en el caso de Mallorca y en Ibiza, mientras que en Formentera y Menorca pueden ser 6 personas. En interiores el máximo es de 4 personas de dos núcleos.
“Esto no quiere decir que sólo tengamos la opción de encontrarnos con otro núcleo de convivencia en establecimientos de restauración”, ha dicho Gómez, quien ha recordado que hay otras opciones, como ir a pasear, a los parques o a las playas. Pero siempre –ha insistido- teniendo en cuenta que se pueden reunir como máximo seis personas de dos núcleos de convivencia y manteniendo todas las medidas, especialmente la mascarilla y la distancia social.
Los botellones no están permitidas bajo ninguna circunstancia. Ni en parques, ni plazas ni a aparcamientos ni a cualquier otro espacio público.
Actas de denuncia y sanciones
Desde la aprobación el pasado mes de julio del Decreto que establece el régimen sancionador específico para hacer frente en las infracciones contra la normativa de la COVID-19, la Administración de la Comunidad Autónoma ha recibido un total de 33.000 actas de sanción levantadas por los diferentes cuerpos y fuerzas de seguridad y los inspectores.
De estos, ya se han registrado un total de 14.920 denuncias, de las cuales 10.826 en Mallorca, 1.294 en Menorca, 2.572 en Ibiza y 228 en Formentera. Los otros expedientes están en proceso, a la espera de ser revisados y registrados. De éstos expedientes registrados, un total de 1.215 se han presentado contra establecimientos (empresas), mientras que la gran mayoría (13.705) han sido contra particulares.
Hasta ahora, la Comunidad Autónoma ha tramitado propuestas de sanción económica por un valor de 3’3 millones de euros, la mayor parte de las cuales afectan establecimientos (2,5 millones de euros) y el resto a particulares. Del total de sanciones, 2.040.019 son sanciones muy graves, 608.452 son graves, y 660.632 son leves. Por islas, las sanciones afectan principalmente en Mallorca (2.319.000 €) y Ibiza (858.994€), seguidas por Menorca (100.702 €) y Formentera (30.000 €).
Actualmente, la Baleares cuenta con 13 instructores, que revisan las actas presentadas por los cuerpos y fuerzas de seguridad o inspectores propios de la CAIB. A la vista de los hechos recogidos a las actas, los instructores instruyen, tipifican las faltas y proponen la sanción. Para hacer frente al gran volumen de actas de denuncias recibidas, Garrido ha anunciado que se reforzarán de forma inminente los equipos administrativos y de instrucción, con el objetivo de dar trámite de forma más ágil a los expedientes.
La consellera Garrido ha recordado que los operativos de vigilancia coordinados por el Gobierno no tienen un fin recaudatorio sino disuasorio, para garantizar que tanto particulares como establecimientos cumplan las normas.