Pablo Rojo / La crisis sanitaria del coronavirus ha traído consigo una mayor concienciación por el medioambiente que, sumada a la crisis económica derivada de la anterior, ha provocado un incremento de la compraventa de artículos de segunda mano en una inesperada alianza en favor de la economía circular.
La comercialización de productos usados y el reacondicionamiento de otros artículos para darles una nueva vida contribuyeron a reducir el gasto de materias primas y energía además de las emisiones contaminantes, como demuestra un análisis de la compañía Cash Converters, según el cual el sector de la segunda mano en España permitió reducir hasta 800.000 toneladas de CO2, el equivalente a las generadas por 930.000 personas en un mes.
Los datos de esta empresa certifican el incremento de artículos de este tipo que, en 2020, alcanzaron los 3 millones de unidades solo en las ventas a través de la web aunque, para consolidar el crecimiento y lograr un comercio de segunda mano «eficiente y duradero», la empresa destaca la necesidad de destacar tres conceptos básicos: ahorro, calidad y garantía.
A ello se ha sumado la creciente preocupación de los consumidores por el impacto ambiental, lo que ha llevado a Cash Converters a crear un ‘Ticket verde’ en sus tiendas físicas, mediante el cual la compañía realiza donaciones a Reforesta, asociación sin ánimo de lucro que trabaja en la conservación y recuperación de los bosques.
Wallapop
En una línea similar se muestra otra de las empresas dedicadas al sector, Wallapop, según la cual los productos del hogar fueron los que mayor movimiento generaron en sus servidores debido al confinamiento de la población.
Por ello, precisa en un comunicado que las principales búsquedas de objetos de segunda mano fueron de artículos para hacer deporte en casa (un 200 % más de lo normal) y de pequeños electrodomésticos para cocinar, un 66 % más.
El estudio ‘La red del cambio: los consumidores frente al reto de la recuperación sostenible’, elaborado por Wallapop y la consultora Ipsos, prevé que esta tendencia irá en aumento y que el «80 % de los españoles seguirá apostando por un consumo responsable» en el futuro.
Según este informe, el 77 % de los ciudadanos «incorporará el comercio local a su consumo habitual», mientras que el 51 % considera que «la pandemia traerá consigo un aumento del activismo ambiental» y el 48 % se declara en contra de que los gobiernos se centren en recuperar «exclusivamente» la economía.
Nuevos hábitos de consumo
Todos estos datos apuntan a una mayor concienciación social y ambiental, especialmente entre la población más joven, que se verá reflejada en un progresivo aumento de nuevos hábitos de consumo basados en la compra de segunda mano y el comercio justo.
Otra firma del sector es Back Market, cuya gerente de desarrollo sostenible, Michelle Richard, ha explicado a Efe que «la principal misión» de esta compañía dedicada al reacondicionamiento de productos electrónicos pasa por «demostrar a los consumidores que actualmente no existen razones para comprar un producto nuevo» mientras pueda reutilizarse uno usado.
Richard ha asegurado que «sabemos que comprar un teléfono inteligente reacondicionado permite salvar alrededor de 30 kilogramos de CO2 y, en el caso de una computadora, 300 kilogramos» en un mercado como el electrónico en el que «más de la mitad de las emisiones globales son consecuencia de la producción de aparatos nuevos».
Por ello, los cuatro millones de clientes que afirman tener en el mundo han acudido a sus productos «en un 75 % por el ahorro en la compra y en un 25 % por participar en un consumo responsable que reduzca el impacto ambiental», si bien este último porcentaje «está subiendo mucho» a la hora de tomar la decisión de adquirir un artículo reacondicionado.
EFE
No será que se «potencia» la compra de productos de segunda mano porque bajó el poder adquisitivo de los ciudadanos en estos gobiernos social-demócratas (PP-PSOE) … ? No por nada tenemos 1,6 billones de deuda pública, siendo el 120% del PIB. No, los ciudadanos de España no son más ecologistas ni nada por el estilo, SINO QUE SON MÁS POBRES ! España no estaba preparada desde hace una década para contingencias como el coronavirus ni ninguna otra catástrofe, porque la social-democracia no es sostenible, y mantuvo la deuda pública al 100% del PIB desde 2009 hasta 2019 de forma TOTALMENTE IRRESPONSABLE.