NouDiari / La UD Ibiza ha superado en Can Misses al Barcelona B (2-1) en un partido en el que ha sabido rehacerse tras ser dominado en el primer tiempo para sumar tres puntos que le allanan el camino hacia la fase de ascenso a Segunda A, categoría por la que suspira el club ibicenco.
Se adelantaron los insulares en el marcador aprovechando una de las pocas debilidades que tiene el conjunto azulgrana, la defensa de las jugadas a balón parado. Fue en el minuto 17, en un córner desde el flanco derecho botado por Javi Lara, prolongado de cabeza por Rodado en el primer palo e introducido por error en propia puerta por Manaj.
El gol, lejos de amedrentar al Barça B, despertó a la bestia de jugar al fútbol que es este equipo. Y desde ese momento se hizo con el control total y absoluto del balón y del partido y sometió al Ibiza al ostracismo, con lo que su papel hasta el descanso fue secundario.
Los jugadores de Juan Carlos Carcedo no sabían cómo despegarse la presión ejercida por su adversario, que no le daba un milímetro de espacio ni un segundo de tregua. Recuperaba el balón casi de forma inmediata en cuanto lo perdía y el cuadro local no podía hacer nada para evitarlo.
El rodillo aplicado por los catalanes tuvo recompensa en el minuto 31, cuando Peque, en una gran acción personal, engatilló un fuerte y colocado disparo desde el balcón del área que superó al meta insular por su escuadra izquierda.
El tanto no frenó el vendaval de fútbol del Barça B, que siguió siendo dueño y señor de la zona ancha y no paró de buscar el segundo ante una UD Ibiza empequeñecida ante la capacidad asociativa y el trato raso y aseado de balón de su rival, cuya calidad en el centro del campo es más propia de una categoría superior que a la Segunda División B en la que milita.
El partido llegó al intermedio con empate a uno y con el Ibiza con muchas cosas que mejorar de cara a una segunda parte en cuyo inicio, eso sí, estuvo más entero y menos acosado en la medular, lo que le permitió aparecer de forma intermitente por las proximidades del área ajena con peligro y no solo a balón parado, aunque sin prodigarse en la elaboración.
La superioridad blaugrana se diluyó y las fuerzas se igualaron, el partido se equilibró, con dos estilos de juego muy diferenciados pero sin que uno acabara de imponerse al otro de forma clara, como había ocurrido en el primer tiempo después del primer gol.
Hasta que Sergio Castel, en el minuto 81 y después de un nuevo córner, rematara al fondo de las mallas tras un mal despeje de la zaga catalana para poner el 2-1 en el marcador.
El resultado ya no se movería hasta el final. El triunfo despeja el panorama hacia la fase de ascenso a Segunda A a un Ibiza que tras ser sometido ha sabido salir del bache en el segundo acto para derrotar al todopoderoso filial barcelonista, algo que no está al alcance de todos los equipos en esta categoría.