LA REVOLUCIÓN POP-ART
@L.F./ Puede que esta semana más de uno y más de dos se lleven una sorpresa morrocotuda al descubrir que Nick Furia, ni es negro, ni se parece a Samuel L. Jackson. Si bien es cierto que la versión “ultimatizada” de Brian Hitch que pudisteis ver no hace mucho en esta misma sección esta basada en el popular actor, y que este sacó la máxima rentabilidad de ello en la reciente adaptación cinematográfica de Los Vengadores, el Nick Furia original de los cómics ni era mondo lirondo ni tampoco afromericano aunque, efectivamente, sus dos versiones llevan un parche en el ojo y capitanean la organización gubernamental encubierta de espionaje en Marvel Comics: S.H.I.E.L.D (originalmente acrónimo de Supreme Headquarters, International Espionage, Law Enforcement Division y posteriormente cambiado a Strategic Hazard Intervention, Espionage and Logistics Directorate) En las primeras ediciones de Marvel en español se la denominaba E.S.C.U.D.O, traducción literal de la palabra “shield”, anglicismo que en la actualidad se utiliza en nuestro país como abreviación de Sistema Homologado de Inteligencia, Espionaje, Logística, y Defensa. Ha quedado claro ¿no? De todos modos, en breve se estrenará la televisiva Agentes de S.H.I.E.L.D, una esperadísima serie por nos, los frikis, que despejará multitud de dudas respecto a la organización y sus dichosas siglas de marras.
Furia es un personaje con solera y largo recorrido que a pricipios de los 60’ gozó de su primera serie regular propia titulada El Sargento Furia y sus Comandos Aulladores, en la que puro en ristre lideraba a un grupo de soldados que combatían a los nazis durante la II Guerra Mundial. Una vez cancelado su título y finalizado el conflicto armado, Nick se dejó caer en un número de Los 4 Fantásticos de 1964, trajeado y con su característico parche en el ojo izquierdo. El carismático personaje trabajaba ahora para la C.I.A, y poco tiempo después regresaría al primer plano en las páginas de Strange Tales ya como líder de S.H.I.E.L.D, la agencia de espionaje encargada de pararle los pies a la organización terrorista Hydra (llamada así por la capacidad de regenerarse con dos nuevos secuaces por cada uno caído) La serie encabezada por los inevitables Stan Lee y Jack Kirby reflejaba la fiebre sesentera por cualquier cosa relacionada con el espionaje, y esa misma década y la siguiente fueron ciertamente prolíficas en adaptaciones del género, ya fuera en series de televisión como Los Vengadores (nada que ver con el cómic Marvel), Misión Imposible o el cinematográfico James Bond. Podría decirse que Nick Furia era el equivalente en viñetas a estos personajes, aunque mucho más rebelde, espontáneo y menos elitista que los anteriores, algo que dota al nuestro héroe de una personalidad más real y cercana.
Mi primera toma de contacto con el trabajo de Jim Steranko (EE.UU, 1938) fue un póster de Spiderman que lució durante muchos años en mi habitación adolescente. El artista mostraba una versión más inquietante y arácnida que las anteriores, pero sobretodo, mucho más humana. La máscara encajaba sobre un marcado rostro pomuloso, dándome por primera vez la sensación de que bajo el disfraz de justiciero se escondía, efectivamente, una persona tangible de carne y hueso. Su feliz encuentro con nuestro protagonista se produjo en Strange Tales numº 152, fechado en enero de 1967, trabajando los bocetos de Kirby y bajo un guión de Stan Lee . Poco más tarde, pasaría a ocuparse del personaje en su totalidad, y fue entonces cuando su abrumador despliegue técnico le convirtió, a pesar de su corta carrera en el medio, en el artista visual más influyente y revolucionario de los cómics (aun no superado a día de hoy) desde el mismísimo Will Esiner, que se dice pronto.
En plena efervescencia del Pop-Art liderado por la Factoría de Andy Wharhol, Steranko aplicó muchos de sus conceptos y de otras artes como el cine a las viñetas de Furia, en Strange Tales primero y su propia colección, Nick Furia, agente de S.H.I.E.L.D a partir de 1968, una serie que le sobreviviría apenas un puñado de números tras su abandono en la quinta entrega publicada ese mismo año para dedicarse a otros campos de la ilustración y colaborar también en películas como Indiana Jones, en busca del arca perdida de Spilberg o Drácula, de Bram Stoker, dirigida por Coppola. A pesar de su corta estancia en Marvel y de que sus guiones se ajustaban escrupulosamente a los estándares clásicos de soap opera marcados por Marvel Comics, al bueno de Jim le sobró tiempo para poner patas arriba a todo el medio innovando el apartado
gráfico mediante la inclusión en sus páginas de composiciones oníricas y psicodélicas que proporcionaban ilusiones ópticas de movimiento, perspectivas de profundidad cinematográfica, páginas sin bordes en las viñetas que fusionaban las distintas partes dándole apariencia de globalidad, utilización de las letras del título como viñetas, páginas con disposición de piezas de puzzle, elementos comunes que cambiaban de color en viñetas y páginas sucesivas, secuencias mudas de muchísima extensión, splash pages (dibujos a página completa) sencillos, dobles, ¡e incluso cuádruples! con lo que el lector se veía obligado a comprar dos ejemplares del mismo tebeo para disfrutar de la ilustración en su totalidad, viñetas en las que se entremezclaban dibujos a color con otros a blanco y negro para destacar un elemento y darle un tono opresivo al resto, fondos abstractos, influencias surrealistas, collages, distorsiones, diagramas, fotografías, etc, etc, etc…
A día de hoy, hay snobs que critican su arte tachándolo de “…envejecido y pasado de moda. Al haber caído en desuso, los elementos psicodélicos y pop-art le dan a su trabajo un aire frío y caduco” aseguran los muy lerdos. Pues bien, yo os puedo asegurar que la relectura es fresca y trepidante, palabra de freak no-diplomado. Nick Furia, agente de S.H.I.E.L.D es un sofisticado ejercicio de aventura en estado puro, que buena falta nos hace.
Lluís Ferrer Ferrer (Cala Mastella, 1971) Especialista en tebeos y demás vicios insalubres, es el escritor (i)responsable de la Trilogía ibositana (2008-09-10) traducida al castellano y recopilada recientemente en El Hondero (2013), y de los guiones de la Webserie Salvador, un superhéroe low cost (2012-13)
El comic de mayor influencia grafica desde The Spirit de Will Eisner. Enorme Jim Steranko. Feliz domingo de tebeos.
El comic de mayor influencia grafica desde The Spirit de Will Eisner. Enorme Jim Steranko. Feliz domingo de tebeos.