Joan Miquel Perpinyà / La dirección nacional de Ciudadanos (Cs) parece haber decidido un cambio en su estrategia de alianzas, que pasaría por unirse al PSOE y desalojar al PP de algunas instituciones en las que ahora los populares gobiernan gracias a los naranjas.
Así, Cs presentó ayer sorpresivamente una moción de censura en la Región de Murcia (algo que según algunas informaciones publicadas, venían negociando con los socialistas varias semanas atrás), lo que precipitó que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso (PP) disolviese la Asamblea autonómica y convocase elecciones anticipadas para el próximo día 4 de mayo.
Para impedirlo, PSOE y Más Madrid presentaron una moción de censura que impediría disolver la cámara. Además, el PSOE presentó otra moción de censura en Castilla y León, y ya se verá qué hace Cs allí.
¿Puede afectar todo este guirigay a los pactos que PP y Cs mantienen en el Consell d’Eivissa y en el Ajuntament de Sant Antoni? Lancé ayer esta pregunta en Twitter y desde Cs Sant Antoni se apresuraron a asegurar que: “Los planes de Cs San Antonio y Cs Baleares son los de trabajar por y para nuestra ciudadanía. Así lo estamos demostrando tanto en el Ajuntament de Sant Antoni como en el Consell d’Eivissa junto a un gran equipo de trabajo. ¡Trabajando se hace camino!”.
Javier Torres (vicepresidente 2º del Consell d’Eivissa), Olivia del Cura (secretaria de organización de Cs Ibiza y Formentera) y José Ramón Martín (teniente de alcalde de Sant Antoni) respaldaron aquella declaración de principios con un “me gusta”.
Así, parece que el pacto entre Cs y PP en el Consell d’Eivissa que otorgó la presidencia a Vicent Marí (el ganador de las elecciones) está a salvo de interferencias nacionales que eventualmente pudiese ordenar la sucesora de Albert Rivera, Inés Arrimadas. Pero el pacto de gobierno en Sant Antoni incluye a un tercer elemento político, el único, solitario e inestable concejal de la coalición Proposta per Eivissa, Joan Torres (de Proposta per les Illes – El PI).
A la izquierda en Sant Antoni le bastaría con que Torres abandone el equipo de gobierno que encabeza Marcos Serra y sume sus fuerzas con quienes fueron sus socios durante la legislatura pasada (PSOE-Reinicia) y con Unidas Podemos, para arrebatar la alcaldía al PP. Y ya pronostico que no tardará en dar ese paso que precipitará a su formación al abismo de la desaparición en Ibiza.
La lista encabezada por Torres en Portmany, Proposta per Eivissa (PxE) obtuvo 458 escuálidos votos, 785 votos menos que en 2015, donde con la marca del PI logró tres concejales. Pese a tener tan magro respaldo electoral, esos anémicos 458 votos le han permitido ser primer teniente de alcalde, regidor del equipo de gobierno que más áreas —y presupuesto— gestiona con gran diferencia: obras públicas, movilidad, transportes, comercio y plan estratégico. Además, para controlar estrechamente al alcalde, colocó a su esposa Marga Ribas como jefa de gabinete de Marcos Serra —¡toma ya!— en un acto de nepotismo que inexplicablemente la oposición municipal no se ha molestado nunca en denunciar y por algo será. Aunque hay que reconocer que se ha avanzado algo, porque en junio de 2019 el exteniente de alcalde Pablo Valdés (Reinicia) le acusó de querer cobrar una nómina del Ayuntamiento sin gestionar ningún área. “Cobrar por mirar, vaya”, dijo Valdés. Joan Torres es, por tanto, el alcalde ‘de facto’ y manda en el consistorio bastante más que Marcos Serra.
Hay que recordar que en junio de 2019, PxE decidió en asamblea pactar con PP y Cs, pero Joan Torres no abrió la boca, pese a que estuvo negociando con PSOE-Reinicia hasta el punto de que los socialistas ofrecieron la cabeza de la número dos de su lista, encabezada por Simón Planells, la tránsfuga Cristina Ribas, regidora que abandonó el PI para unirse al PSOE, como “gesto” para favorecer un pacto. Sin embargo, el actual Torres exigía la alcaldía, cosa a la que el PP se opuso de plano, pero que el PSOE se mostró en disposición de negociar aunque fuera por un año. Pero la asamblea de PxE optó por entrar en el gobierno municipal con PP y Cs, enviando a la oposición a PSOE-Reinicia.
No será Cs quien abra las puertas del Ajuntament de Sant Antoni a PSOE-Reinicia y Unidas Podemos. Será el actual vicepresidente primero de la ejecutiva balear del PI, Joan Torres.
No será Cs quien abra las puertas del Ajuntament de Sant Antoni a PSOE-Reinicia y Unidas Podemos. Será el actual vicepresidente primero de la ejecutiva balear del PI, Joan Torres. Y a no tardar. Y si le dan la alcaldía, cosa muy factible, aún será más pronto. A fin de cuentas, sólo los socialistas y él saben las verdaderas razones por las que decidió romper el pacto de gobierno en febrero de 2019, algo que nunca explicó bien y cuyas razones parecen estrechamente ligadas al millonario concurso por la gestión del agua en Sant Antoni, por más que se diga otra cosa para embaucar al personal.
Torres tiene la llave del gobierno municipal en Portmany. Lo sabe y lo hace valer. Y del mismo modo que rompió su pacto con Pep Tur ‘Cires’, puede romper el que mantiene con Marcos Serra en el momento que se le antoje. Y lo hará, no me cabe la menor duda. Y no le podrán frenar ni el PI, ni su presidente Antoni Amengual, ni mucho menos nadie de PxE.
Club Náutico Ibiza
Mis Cavilaciones de la semana pasada, tituladas El Club Náutico Ibiza se hace trampas al solitario, no sentaron nada bien a la directiva del Club Náutico Ibiza y ya lo comprendo. Tampoco al abogado Rafael Palmer, que contactó conmigo para explicarme que él no había participado directamente como abogado en el concurso del CNI, que tampoco había representado al CM Molinar, y que hace 10 años que no lleva ningún pleito contra la APB. Por más que le pedí que me dijese quién había sido el responsable de que el CNI haya perdido la gestión de las instalaciones en el Port d’Eivissa, no quiso decírmelo. Solo insistió en que él no fue. Pues quede constancia y mis disculpas. Seguiremos buscando al autor material del desaguisado, del que en todo caso hay que responsabilizar a la directiva del CNI.
Juan Torres es un personajillo que se aprovecha de su puesto para sacar todo lo que puede y más. Lo peor de la politica.