La UD Ibiza no afloja y en un partido intrascendente antes del play-off de ascenso después de haber obtenido hace varias jornadas su clasificación ha demostrado que esta temporada no va de bromas, 0-4. Ni siquiera en los partidos en los que no se juega nada, como el de este mediodía ante un Nàstic de Tarragona que venía a Ibiza a por una plaza para la fase de ascenso a Segunda A y que marcha abatido y sin el premio que perseguía como guinda a su buena campaña tras el triunfo del Andorra en Alcoy (2-3).
Y es que el Ibiza tiene pólvora en ataque y a pesar del esfuerzo de su adversario por adelantarse en el marcador en los primeros instante, ha sido el conjunto de Juan Carlos Carcedo el que ha cobrado ventaja. Ha sido a los 26 minutos de partido y gracias a un tanto de Davo, que está en racha, y que ha puesto a su equipo en la pista de lo que iba a ser una goleada de escándalo.
El tanto ha roto los esquemas a su rival, que necesitaba ganar el partido para asegurarse una plaza en el play-off. Eso ha hecho que subiera las revoluciones de su juego e, incluso, se mostrara áspero en la presión, con varias entradas poco deportivas ante las que se ha quejado el Ibiza por la dureza. Sin embargo, eso no ha sido suficiente como para sacar del partido o desconcentrar a un conjunto, el insular, que tiene las cosas muy claras y cuya plantilla aúna suficiente calidad como para superar cualquier tipo de juego, incluso el más bronco.
La seguridad del Ibiza ha empezado en el portero, que además estar atento a todas las llegadas de su adversario se ha permitido el lujo de salir en varias ocasiones con el balón cosido al pie dejando atrás a los delanteros en la presión, para deleite de la grada y susto del banquillo. El Nàstic ha ido desconectándose del encuentro poco a poco debido a la solvencia de los locales, que no le dejaban desplegar su juego y que siempre iban un paso por delante.
La segunda mitad ha sido un calco de la primera, con superioridad pasmosa de los locales, que han marcado tres nuevos goles para dejar las cosas claras. La única mala noticia para el Ibiza, no obstante, ha sido la lesión de Cirio poco después de la reanudación. El delantero, con claros signos de dolor, ha tenido que ser evacuado del estadio y todo parece indicar que se trata de algo serio, según las primeras exploraciones.
El el minuto 53, Davo ha marcado el segundo de su cuenta particular y de su equipo para poner tierra de por medio con respecto a un Nàstic que se ha hundido al ver cómo su objetivo se escurría de las manos ante la superioridad de un bloque, el del Ibiza, que desprende el aroma de una categoría superior, de una división de Plata, la Segunda A, en la que jamás ha jugado un equipo ibicenco.
En el minuto 84, Rodado, que ha disputado también un gran partido, ha anotado el tercero para el Ibiza, pero no el último, porque en el 89, Javi Vázquez, ha marcado el cuarto con un remate de primeras desde la izquierda tras un centro desde el flanco contrario. Al final, victoria aplastante de un Ibiza poderoso que ahora mismo da la impresión de que no tiene porqué temer a nadie y que parece que está facultado para ganar a cualquier rival que le depare el sorteo de mañana.