El Platges de Calvià no ha podido superar al Constància en Mafaluf (0-0) y este empate ha tenido premio para el CD Ibiza, que certifica matemáticamente su ascenso a la Segunda RFEF a pesar de no haber podido pasar del 1-1 este mediodía en el campo del Formentera.
El CD Ibiza, después de no haber podido celebrar el salto de categoría en el campo de Sant Francesc Xavier, necesitaba que el Platges de Calvià, que en esta segunda fase de la competición no está dando su mejor nivel, no ganara esta tarde al equipo de Inca para conseguir subir hoy mismo de categoría.
Y así ha ocurrido en un partido igualado y con más y mejores ocasiones del Platges, que, al sumar un solo punto, ha abierto de par en par las puertas del ascenso al club de Can Misses, que cumple con el objetivo marcado a principio de campaña sin necesidad de apurar todos los partidos que restan para la conclusión del torneo balear de Tercera.
Fue confeccionado el CD Ibiza con este fin, con el de conseguir un ascenso que le situara un peldaño por encima de la Tercera División balear y que le permitiera rivalizar, salvando las distancias, con la UD Ibiza, el otro club que juega en el estadio de Can Misses y que lucha por estar la campaña que viene en Segunda A.
Sea lo que sea lo que depare el futuro, lo cierto es que el fútbol del municipio de Ibiza sigue dando pasos agigantados para situarse en un lugar preferente del mapa futbolístico nacional y el logro del CD Ibiza añade un poco más de pimienta a la pugna por el trono del balompié semiprofesional en Ibiza ciudad.
Este ascenso del CD Ibiza representa el éxito del fútbol modesto pero implicado, comprometido con un proyecto, con una ciudad y con unos colores, el rojo y blanco que viste y que encarna los tonos de la extinta SD Ibiza, el equipo que abanderó este deporte en la isla durante décadas y del que se considera fiel heredero.
Los aficionados al fútbol de Vila están, en definitiva, de enhorabuena gracias al ascenso conseguido por el CD Ibiza y a la posibilidad de que la UD Ibiza pueda lograrlo también este mismo curso, en esta ocasión a la segunda máxima categoría del balompié nacional, en la que jamás ha estado ningún club pitiuso.