Un conductor borracho (1,27 y 1,23 mg/l en el test) sufrió sobre la medianoche de ayer un aparatoso accidente en la avenida de Sant Joan de Ibiza. Al parecer, perdió el control del turismo que conducía, atravesó la mediana y colisionó contra una señal de tráfico, arrancando, asimismo, la base de una farola del alumbrado de la carretera.
A pesar del fuerte y violento impacto, el conductor, que presentaba evidentes signos de embriaguez, salió ileso del accidente. Por este motivo se le practicó la prueba de alcoholemia, que arrojó una tasa cinco veces superior a la permitida.
Se le imputa un presunto delito contra la seguridad viaria por conducir bajo los efectos del alcohol.
Por otro lado, la pasada noche la Policía Local de Ibiza tuvo que intervenir, asimismo, en un botellón en el paseo de ses Figueretes en el que ocho personas fueron sancionadas por beber alcohol en la vía pública y por no llevar mascarilla.