El Ayuntamiento de Sant Josep ha celebrado una nueva Mesa de Turismo para analizar el inicio de la temporada turística, a la que han asistido de manera telemática los representantes de los agentes económicos y sociales, así como un representante del aeropuerto de Ibiza en la que se ha constatado que las expectativas de llegada de turistas “han superado todas las previsiones del sector” con un afluencia que se podría situar “entre el 90 y el 95% de los visitantes que recibió la isla en 2019 en esta época”, según ha recogido el regidor de Turismo, Eduardo Sánchez, que ha participado en el encuentro presidido por el alcalde, Ángel Luis Guerrero.
Pero no todo en esta reactivación acelerada ha sido positivo, porque estos visitantes “se han encontrado muchos servicios de la isla a medio gas”, han expresado los empresarios que reconocen que el volumen de visitantes ha cogido desprevenidos algunos sectores.
Los agentes económicos y sociales han sido muy críticos especialmente con las obras que se realizan actualmente en el aparcamiento del aeropuerto, lo que genera “una muy mala primera impresión cuando se llega a la isla”, según han coincidido los participantes, que también han lamentado las complicaciones para entrar o salir del aeropuerto y la falta de transporte en general. En este sentido “nos han dado la enhorabuena por la decisión de acelerar la entrada en servicio de los taxis estacionales”, una iniciativa a la que después se han sumado el resto de municipios, como ha recordado Sánchez. También se ha puesto sobre la mesa la adopción de medidas para agilizar el paso para la terminal de los vehículos dedicados al transporte de personas.
“Se ha constatado que no éramos conscientes de las ganas de viajar a la isla que había en los mercados emisores y no todos los implicados estábamos preparados para esta avalancha”, ha admitido Sánchez que ha sido el comentario más escuchado en la Mesa, en la que se ha dibujado un panorama muy alejado de la crisis que sufren otros enclaves turísticos. De hecho, los empresarios han expresado las dificultades que están sufriendo ya para encontrar mano de obra cualificada.
También han mostrado “dudas serias” sobre las condiciones en que podrá trabajar el ocio nocturno y ven “poco probable” que se abre a corto plazo. En cuanto a los botellones que se están registrando en puntos del municipio, los participantes han hecho la petición al Ayuntamiento de que los voluntarios de Protección Civil se impliquen en su prevención y asuman tareas de información a los jóvenes que participan en estos encuentros para beber en la calle, una propuesta que se estudiará.
Atendiendo a otra demanda de los participantes, y ante la rápida evolución de la situación, se ha acordado celebrar una nueva mesa de turismo el próximo mes de agosto donde se analizará la marcha de la campaña y se evaluara el resultado de las medidas acordadas.