Nuevo incendio en el vertedero de ca na Putxa un mes y medio después de que se quemara una montaña de plásticos compactados en las instalaciones que se encuentra en la carretera de Cala Llonga. Una nube tóxica y alargada se expande por el horizonte, como se aprecia en las imágenes que acompañan estas líneas, y ha llegado incluso al Port de Sant Miquel, casi en el otro extremo de la isla. Según las últimas informaciones, las labores de extinción van para largo y no se prevé que el incendio se dé completamente por extinguido hasta bien entrada la madrugada o, incluso, hasta la mañana de este sábado, en el peor de los casos.
Desde el Parque Insular de Bomberos de Ibiza han desplazado a varias dotaciones para tratar de contener el avance de las llamas y aplacar el fuego y después se ha reforzado el operativo con más medios. La enorme humareda provocada era visible desde muchos puntos de la isla, puesto que el fuego afecta a una zona de grandes dimensiones donde se acumulan plásticos, además de todo tipo de residuos.
Numeroso vecinos de la zona han tenido que abandonar sus hogares a causa del humo que ha entrado en un primer momento en sus viviendas y que les impedía respirar con normalidad. Una nube tóxica perjudicial para la salud y que les ha obligado a marcharse de sus propiedades a toda velocidad para evitar un claro peligro de intoxicación por inhalación de gases y partículas contaminantes, explican.
Lamentan que esta situación se haya repetido en dos ocasiones en muy poco tiempo (mes y medio) y denuncian que estas molestias se suman al insoportable hedor que desprende el vertedero y que les obliga a permanecer en casa con las ventanas y puertas cerradas en pleno verano. Asimismo, piden a Consell Insular y al Govern balear, así como a todas las administraciones responsables, que tomen las medidas que sean necesarias para poner fin a situaciones como estas y que suponen un peligro para la salud.