El Govern balear ha tomado nuevas medidas restrictivas en Ibiza para tratar de frenar los contagios, especialmente en residencias de mayores, donde se han producido decenas de casos, varios de ellos hospitalizados, y ha habido tres fallecimientos desde que se detectaron varios brotes, el peor de ellos en Sa Residència.
El conseller de Movilitat i Transports, Josep Marí Ribas, Agustinet, ha explicado hoy en el Consell tras una reunión con el presidente de la institución, Vicent Marí, que tanto trabajadores de estos centros como visitantes tendrán que acreditar para acceder a ellos o bien estar vacunados o bien haber pasado la enfermedad en los seis meses anteriores o bien contar con pruebas PCR o antígenos negativas.
En el caso concreto de los trabajadores las pruebas deberán ser tres semanales y al menos dos de ellas PCR. Las pruebas las pagará el Govern balear, es decir que los trabajadores no vacunados o que no hayan pasado la enfermedad no tendrán que pagar estas pruebas obligatorias: irán a cargo del erario público.
Según datos del Govern balear en Ibiza hay 932 personas trabajando en residencias. De ellas hay 779 (83,58%) con al menos una dosis y 756 con las dos dosis, (81,12%). Eso significa que hay 176 personas que no han recibido dosis alguna de la vacuna.
Esta medida entra en vigor mañana martes 3 de agosto.
También se establece que los residentes, si salen del geriátrico, solo se relacionen fuera de él con personas vacunadas, que hayan pasado la enfermedad en los últimos meses o que tengan pruebas que acrediten que son negativos en Covid.
Los monitores de campamentos de verano, por su parte, deberán someterse a pruebas y dar negativo antes del inicio de la actividad.
Otra medida nueva con respecto a lo que ya está en vigor, es que los acontemicientos deportivos y culturales podrán tener un aforo de 1.000 personas en interior (ya estaba en vigor esta medida) y de hasta 5.000 personas en exterior (un incremento, ya que eran 3.000 hasta la fecha) pero, para acceder, los mayores de 12 años deberán presentar vacunación, acreditación de haber pasado la enfermedad o PCR o antígenos reciente y negativo.
Esta medida entra en vigor el 14 de agosto.
También se ha acordado que las restricciones de reuniones sociales aumenten en Formentera desde el próximo sábado y se aplican en el mismo sentido que se hacía hasta ahora en Mallorca, Menorca e Ibiza, donde están prohibidas desde la 1 de la madrugada.
El conseller ha explicado algunos de los datos de la pandemia que justifican estas medidas.
«Globalmente, la comunidad autónoma presenta una incidencia acumulada a 14 días por 100.000 habitantes (IA14) en población general de más de 1.000 casos», ha explicado. Así, a fecha del viernes, 30 de julio, en todas las islas, el nivel de riesgo en cuanto a la incidencia acumulada era muy elevado, superándose la IA14 de 800 en todas las islas, con una IA14 de 903,3 casos por 100.000 habitantes en Mallorca; 811,4 casos por 100.000 habitantes en Menorca; 1750,0 casos por 100.000 habitantes en Ibiza; y 873,7 casos por 100.000 habitantes en Formentera
En el conjunto de las islas, el número reproductivo básico (que representa el número medio de contagiados que produce cada nuez contagiado) es de 0,93. En Mallorca, es de 0,92; en Menorca de 0,74; en Ibiza de 1,04; en Formentera es de 1,45. Este indicador, por lo tanto, parecería indicar una mayor estabilización, o incluso decrecimiento, en las tasas de contagios en Mallorca y Menorca, mientras que Ibiza estaría en una situación tendente al crecimiento y Formentera (donde la baja población lleva a una mayor volatilidad de los datos que hace que se tenga que interpretar este indicador con mayor precaución) estaría en una situación de fuerte crecimiento.
La tasa de positividad es de 12,85%, casi triplicando el parámetro observado a finales del mes de junio (4,81% día 30 de junio), y mostrando todavía un crecimiento, más moderado, respeto el dato de 14 de julio (10,84%).
Más vale tarde que nunca, pero buena iniciativa. Es increíble saber que muchos trabajadores de estos centros (normalmente los más mediocres como auxiliares, etc) NO quieren vacunarse. Por otro lado, el Govern debería estar más «encima» de las residencias del Govern y obligar a sus trabajadores a cumplir sus funciones, porque una parte considerable no las cumplen y va en detrimento de una buena atención y cuidados a los residentes (es gravísimo…y después lo qué hacen es cogerse la baja porque saben que son intocables gracias a sus sindicatos…). Es de equipo de investigación lo que ocurre con una parte del personal de estas residencias: gente con bajo nivel intelectual, poca formación, pocas ganas de cumplir con sus responsabilidades, y un amplio escudo que los hace intocables. Es el caldo de cultivo perfecto para la desidia y el mal hacer. Y otro tema, si la inmunidad de las vacunas NO es infinita, ¿no se debería estar ya vacunando a los primeros que fueron los residentes?..quizás los contagios también vienen por eso (aparte de la ignorancia de trabajadores y familiares)