«Es triste cerrar un negocio que crearon nuestros padres, gracias también a nuestros abuelos, pero en la vida uno tiene que tomar decisiones que duelen. Sabíamos los tres hermanos que un día esto llegaría y hoy es el día. Gracias a todos los clientes de las Pitiusas».
Con este mensaje se ha despedido de sus clientes la querida empresa de Yogures La Bomba, creada en 1954 por Juan Manuel Marí, fallecido en 2017, y que actualmente regentaban sus hijos Joaquín, Joan y Carles.
La familia ha recibido una avalancha de mensajes y llamadas en cuanto se ha sabido la noticia. ¿Los motivos? «Muchos», comenta Joan Marí a Noudiari, desde la feroz competencia de las grandes superficies y la consiguiente bajada de ventas, a los problemas de tener una empresa ubicada en La Marina, con los «cierres de accesos» que padecen.
Con la voz algo rota, Joan asegura que es «el día más triste» que ha vivido y que mañana echarán el cierre definitivo después de completar unos repartos, aunque sus clientes ya lo saben desde el lunes.
Ubicado en la calle de Cipriano Garijo número 6 del barrio de La Marina, este negocio comenzó como lechería para después vender quesos, hasta que se especializó en yogures. Desde su nacimiento hasta hoy, en estos 67 años, han seguido la misma receta, basada en lo natural y el buen producto.
La característica botella de un litro ha sido un clásico en muchos hogares y siempre ha estado presente, sobre todo en pequeños supermercados, a pesar de la brutal competencia en el sector.
La empresa toma su nombre de la antigua denominación de este sector del barrio de La Marina.